La Generación Z pide paso en la NBA

playoffs– dejaron claro en el estreno de la lucha por el anillo que a la nueva generación de estrellas de la NBA no les tiembla el pulso. Que a pesar de su juventud están preparados ya para tomar el relevo y liderar un nuevo baloncesto más veloz y espectacular que engancha a los más jóvenes. La primera jornada de playoffs dejó claro que hay futuro en la NBA. Que después de LeBron, Curry o Harden viene una generación plena de talento que seguirá generando momentos únicos alrededor de la canasta. Son los nuevos «niños» del baloncesto mundial, que dejaron su impronta en el primer envite de los playoffs. Donovan Mitchell aterrizó en la NBAen 2017 sin hacer mucho ruido. Fue elegido en el número 13 por los Nuggets, que lo traspasaron a Utah a cambio de un par de jugadores de reparto. El desprecio no le importó a Mitchell, que encontró en los Jazz un lugar para crecer. Allí ha ido subiendo escalones hasta convertirse en imprescindible y en una de las estrellas de la liga. Explosión que encontró el lunes su máximo esplendor, con una actuación soberbia que no tuvo premio, pero que ocupa ya un lugar de privilegio en los libros de historia. Sus 57 puntos frente a los Nuggets son la tercera mejor anotación de siempre de un jugador en un partido de playoffs, solo superado por leyendas como Michael Jordan (63 a los Celtics en 1986) o Elgin Baylor (61 a los Celtics en 1962). La marca no le sirvió para ganar por culpa de otro talento emergente como Jamal Murray, base de los Nuggets, que asumió su cuota de protagonismo en el último cuarto y la prórroga para darle ventaja a Denver en la eliminatoria. Ambos, bromeaban después del encuentro en plena burbuja de Orlando. «Ahí tenéis al chico de los 57 puntos que no ha ganado el partido», ironizaba Murray –autor de 36 puntos– tras encontrarse en el hotel con el escolta de los Jazz. Esa buena sintonía es otra de las características de esta Generación Z de la NBA. Jóvenes que disfrutan con el baloncesto y que comparten esa pasión sin rencores, huyendo de las habituales rencillas presentes a lo largo de la historia en la liga americana. Como Mitchell, Luka Doncic también se fue al hotel enfadado por la derrota de su equipo a pesar de una actuación –otra más– soberbia. El esloveno rozó el triple doble ante los Clippers (42 puntos, 7 rebotes y 9 asistencias) y sumó una nueva marca a su larga lista de récords. Nunca antes un debutante en los playoffs había anotado tantos puntos. Alegría menor, pues la derrota dejó tocado al exmadridista. Su habitual serenidad se vio trastocada tras la expulsión de Porzingis, que le dejó huérfano en los minutos finales, lo que aprovecharon los angelinos para llevarse la victoria (118-110). En los Celtics de Brad Stevens el talento precoz lleva el nombre de Jayson Tatum, un joven disfrazado de veterano, pues a sus 22 años lidera a la franquicia más laureada de la liga. Ante los Sixers sumó 32 puntos, acaparando el protagonismo en los últimos minutos. Veteranos con