La canción llegó a los oídos de Evaluna Montaner, quien se comunicó con Julia para componer la versión en español. Así, la hija de Ricardo Montaner, el reconocido cantante venezolano, acercó
el trabajo de Michaels a los hispanohablantes, quienes se conmovieron con su talento. Sin embargo, como suele pasar en redes, su fama fue efímera y murió en esa canción.