El tipo de operación elegida para la réplica pareció la conclusión intermedia entre extremos. Se optó por una lluvia de dos tipos de misiles y drones, con un armado que permitiera
su segura neutralización, como ocurrió efectivamente. Aunque EE.UU. lo niega, hubo informes de Turquía, Irak y Jordania anticipando en nombre de Irán, el carácter limitado de la respuesta.