Pero la porción que sí lo hizo influida por el ala liberal del viejo partido conservador, ofreció con ese gesto una visión sobre cómo procesa realmente el establishment norteamericano el significado
del drama ucraniano, lejos de ideologías o fanatismos. Una curiosidad muy elocuente sobre la altura de la preocupación es que quien operó para ese resultado fue uno de los alfiles principales del magnate, Mike Johnson, el titular de la Cámara, ahora amenazado por la destitución debido a ese comportamiento, destino que no permitiría su jefe.