La contraofensiva de Ucrania ya tiene nombre y apellido, y se desenvuelve en una gran campaña en el sur del país donde miles de soldados están dedicados al batalla. Por eso,
El propio Vladimir Putin admitió este jueves que los combates en el sudeste ucraniano "se han intensificado significativamente", aunque indicó que quien sufre las fuertes pérdidas es Kiev.
Putin Insistió en que el impulso de Ucrania en la zona “no tuvo éxito”, aunque no fue posible verificar de forma independiente su informe. Un video de los comentarios de Putin, realizado en San Petersburgo en una cumbre de líderes africanos, fue publicado en Telegram por un reportero de la televisión estatal, Pavel Zarubin.
A su turno, el ministro de Defensa rusa informó que "las fuerzas armadas rusas llevaron a cabo ataques con armas aéreas y marítimas de alta precisión y largo alcance contra aeródromos, centros de mando y despliegue de las fuerzas armadas ucranianas, talleres de ensamblaje y depósitos de drones navales y misiles, de armas y equipamientos militares" occidentales.
Analistas y funcionarios ucranianos y occidentales confirman que la contraofensiva de Kiev, iniciada hace varias semanas, se desenvuelve en el sureste del país.
El incremento de tropas y potencia de fuego se ha centrado en la región suroriental de Zaporiyia, según dijo el miércoles por la noche un funcionario occidental.
El funcionario no estaba autorizado a hacer comentarios sobre el asunto y habló bajo condición de anonimato.
Los combates se han intensificado en las últimas semanas en varios puntos a lo largo de los 1.500 kilómetros del frente conforme Ucrania desplegaba armas avanzadas proporcionadas por Occidente y tropas con instrucción occidental ante las atrincheradas fuerzas rusas que invadieron el país hace 17 meses.
Una enorme operación militar
La contraofensiva es una enorme operación militar que probablemente se preparó durante meses. La logística militar requiere enviar suministros de munición, alimentos, material médico y piezas de repuesto al frente. La operación enfrenta una enconada defensa rusa que incluye campos de minas, trincheras y obstáculos antitanque.
En su mayoría, las autoridades ucranianas han guardado silencio sobre los acontecimientos en el campo de batalla desde que comenzaron su contraofensiva, aunque la viceministra de Defensa, Hanna Maliar, dijo que las tropas avanzaban hacia la ciudad de Melitopol, en la región de Zaporiyia.
Aunque ese movimiento podría ser una finta táctica y los dos gobiernos han empleado la desinformación para ganar ventaja en el campo de batalla, esa maniobra encajaría con las predicciones de los analistas.
Los expertos esperaban una contraofensiva que intentara abrirse paso en el corredor terrestre entre Rusia y la península de Crimea, anexionada por Rusia, en dirección a Melitopol, que está cerca de la costa del Mar de Azov.
Eso podría dividir a las fuerzas rusas y cortar las rutas de suministro de las unidades situadas más al oeste. Rusia controla ahora toda la costa del Mar de Azov.
Había intensos combates en zonas en el sur y el este de Ucrania, lejos de la capital, Kiev, y no era posible verificar las afirmaciones de ningún bando.
Combates feroces
Lo cierto es que los combates están llenando los quirófanos ucranianos montados cerca del frente.
Los horrores de la guerra llegan durante la noche a un hospital del este de Ucrania, una procesión de camillas con cuerpos inertes traídos rápidamente desde la línea del frente.
Los soldados vienen con las extremidades vendadas y empapadas de sangre, los rostros ennegrecidos por fragmentos de metralla y los ojos desconcertados fijos en el techo, en estado de shock.
Últimamente, llegan cada vez con mayor frecuencia, prueba de que los combates son feroces.
El Instituto para el Estudio de la Guerra, un centro de estudios con sede en Washington, indicó que las fuerzas ucranianas habían iniciado el miércoles “una operación de contraofensiva mecanizada significativa en la región occidental de Zaporiyia”, y que “parecen haber atravesado algunas posiciones defensivas rusas preparadas con antelación”.
El centro citó fuentes rusas, como el Ministerio ruso de Defensa y varios blogueros militares rusos destacados.
Pero el funcionario nombrado por Moscú para dirigir la región parcialmente ocupada de Zaporiyia, Yevgeny Balitsky, dijo que las fuerzas ucranianas habían intentado sin éxito abrirse paso en las defensas rusas en la zona el jueves por la mañana.
Las fuerzas de Kiev “sufrieron pérdidas significativas y se retiraron a (sus) posiciones”, afirmó Balitsky.
Sin embargo, en lo que parecía una medida preventiva, el Servicio Federal de Seguridad de Rusia prohibió el acceso civil a la Punta de Arabat en Crimea, una estrecha franja de tierra que conecta la península anexionada con la región parcialmente ocupada de Jersón. Jersón es una vía de entrada clave a Crimea.
La prohibición indefinida es necesaria para contener amenazas de seguridad, según dijo el FSB en un comunicado citado por la agencia rusa de noticias RIA Novosti.
Las autoridades estadounidenses, que han proporcionado armas e información a Kiev, declinaron hacer comentarios sobre las últimas novedades, aunque en el pasado han pedido paciencia mientras Ucrania trata de hacer mella en las posiciones rusas.
Éxitos y reveses
El secretario de Defensa de Estados Unidos, Lloyd Austin, dijo durante una visita a Papúa Nueva Guinea que los esfuerzos de Kiev por recuperar terreno ocupado por Rusia desde que lanzó su invasión de plena escala en febrero de 2022 serían “duros” y “largos”, con éxitos y reveses.
El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, dijo que se estaba produciendo una “intensa batalla”, pero declinó dar más detalles.
“Creemos que las herramientas, el equipamiento, la instrucción, la asesoría que muchos de nosotros hemos compartido con los ucranianos durante meses les colocan en una buena posición para tener éxito sobre el terreno en recuperar más del territorio que Rusia ha arrebatado a Ucrania”, dijo Blinken durante una visita a Nueva Zelanda.
Bombardeos rusos
Por otro lado, los bombardeos rusos alcanzaron otra vez la región de Odesa, en el sur de Ucrania, donde un civil murió y la infraestructura portuaria fue afectada, según indicó el gobernador de Odesa, Oleh Kiper.
Las fuerzas rusas emplearon misiles de crucero Kalibr lanzados desde el mar Negro, señaló. Moscú ha realizado varios ataques sobre la región desde que abandonó un acuerdo sobre exportación de grano.
La fuerza aérea ucraniana dijo el jueves que había interceptado 36 misiles rusos lanzados desde bombarderos estratégicos Tu-95MS.
AFP y Associated Press
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