Basabose, que llegó a obtener el estatuto de refugiado político en Bruselas escondiendo su identidad real, está acusado de ser uno de los principales financiadores de las milicias hutus. Antiguo alto
cargo militar y empresario millonario, entregaba a los milicianos Interahamwe armas y dinero, y eso con conocimiento del presidente Habyarimana. Basabose era además uno de los propietarios de la cadena de radiotelevisión “Mil Colinas”, la que durante el genocidio lanzaba a diario llamados a matar tutsis.