Trump, calificándolo como un "precedente peligroso" que perjudica al pueblo estadounidense.
En declaraciones tranquilas y mesuradas desde la Casa Blanca, Biden dijo que la decisión significaba que era muy poco probable que Trump fuera a juicio antes de las elecciones del 5 de noviembre por su papel en la búsqueda de anular los resultados de las elecciones de 2020.
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La Corte Suprema de Estados Unidos determinó el lunes que Trump no puede ser procesado por ninguna acción que estuviera dentro de sus poderes constitucionales como presidente, pero puede ser por actos privados, en un fallo histórico que reconoce por primera vez cualquier forma de inmunidad presidencial contra el enjuiciamiento.
"Esta nación fue fundada sobre el principio de que no hay reyes en América. Cada uno de nosotros es igual ante la ley. Nadie, nadie está por encima de la ley. Ni siquiera el presidente de Estados Unidos", dijo Biden.
Joe Biden contra el fallo que favoreció a Trump: "No hay reyes en América"
Con la decisión del lunes, dijo, "eso cambió fundamentalmente". Biden se postula para la reelección contra Trump y criticó duramente las acciones de su rival relacionadas con el asalto al Capitolio de Estados Unidos del 6 de enero de 2021 por parte de los partidarios de Trump, que creyeron las falsas afirmaciones de Trump de que había ganado las elecciones de 2020.
"Ahora el hombre que envió a esa turba al Capitolio de Estados Unidos se enfrenta a una posible condena penal por lo que sucedió ese día. El pueblo estadounidense merece tener una respuesta en los tribunales antes de las próximas elecciones", dijo Biden, refiriéndose a que Trump está siendo juzgado por su papel en el estímulo de los disturbios.
Biden dijo que el público tiene derecho a saber cuáles son los resultados de ese enjuiciamiento antes de las elecciones de noviembre. "Ahora, debido a la decisión de hoy, eso es muy, muy poco probable. Es un flaco favor a la gente de esta nación".
Biden, de 81 años, estaba haciendo su primera serie de comentarios en la Casa Blanca desde que su inestable debate contra Trump la semana pasada llevó a llamados para que se hiciera a un lado como abanderado del Partido Demócrata para las elecciones.
Después de tropezar con sus palabras en el escenario del debate de Atlanta, sus comentarios y comportamiento están siendo examinados en busca de señales de que está a la altura de la tarea de postularse para la reelección y gobernar el país por cuatro años más.
