No es novedad que Milei se haya disculpado con el Papa. En el tramo final de la campaña lo hizo varias veces. Pero, se sabe, lo que dicen los políticos (aún
los recién llegados a la política) en campaña tiene escaso o nulo valor. La urgencia es sumar o, al menos, no perder votos. Aunque, luego, como presidente, fue al Vaticano y selló la reconciliación.