Un hombre con antecedentes penales intentó robar un auto en la localidad de Ituzaingó este domingo, aunque no pudo lograr su propósito porque el dueño del vehículo, con la ayuda de un grupo
Todo comenzó cuando un delincuente observó que en el cruce de las calles Albert Schweitzer y Lisandro de la Torre, en aquel partido del oeste del conurbano bonaerense, había un automóvil Fiat Palio estacionado sin su conductor y con las llaves colocadas, por lo que decidió subir al mismo e intentar darle marcha.
El dueño del vehículo, que había bajado del rodado unos segundos antes, observó como el ladrón abordó el auto y rápidamente intento ingresar por la ventanilla del acompañante para poner el freno de mano. Fue en ese contexto que inició un forcejeo con el asaltante, el cual derivó en que el auto chocara contra un paredón.
Posteriormente, vecinos de la zona acudieron al lugar y agredieron físicamente al delincuente, mientras que otros llamaron a la Policía, que finalmente procedió a su detención.
Por último, el fiscal a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 2 del distrito, Patricio Ventricelli, pidió la detención del hombre por el delito de "Robo calificado" de un vehículo dejado en la vía pública en grado de tentativa.
Detención ciudadana en el tren Roca
Un ladrón intentó robarle el celular a una mujer en una de las formaciones del ferrocarril Roca, cuando se estaban cerrando las puertas. Pero, cuando corrió por el andén, el teléfono se le cayó a la vía. El tren no arrancó y volvió a abrir las puertas. Allí, los propios pasajeros lograron inmovilizar al delincuente hasta que llegara la Policía. Ocurrió en la estación Bernal, en Quilmes, a mediados de marzo. Y todo quedó registrado por las cámaras de seguridad.
El video es por demás explícito. Se ve que un hombre intenta escapar corriendo un segundo antes de que las puertas se cerraran. Sin embargo, en medio de la corrida, pierde el control del teléfono y se le cae hacia las vías.
El celular cae en el piso, rebota dos veces, y termina en la vía: en el hueco entre la formación y el andén. Ese segundo de duda del delincuente entre volverlo a buscar y continuar fue su propia trampa.
Es que la formación no arrancó y se volvieron a abrir las puertas. Allí salió a perseguirlo la desesperada mujer. El delincuente corrió unos metros, pero desde otro vagón, un pasajero logró interceptarlo cortándole la carrera.
Tras empujarlo contra la baranda, quedó involucrado otro hombre que esperaba en el andén. Allí, en medio de forcejeos lograron inmovilizar al delincuente. Luego de reducir al ladrón, finalmente se le dio aviso a la Policía para que procediera a su detención. El celular fue recuperado.
Con información de Télam.
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