"Se hace muy difícil todo, no hay ánimo para hablar", trata de disuadir el contacto con este medio, pero sale María Noguera, la mamá de Loan, visiblemente demacrada. "Hace días que
no duermo, no doy más, ya no sé qué pensar, estoy confundida, pero veo a todos confundidos, a las autoridades y a los vecinos también". Mariano, su hijo la abraza. "No descartamos nada, no queremos ponernos en contra de nadie, confiamos y desconfiamos, porque Loan no aparece, pero no podemos hablar mucho".