La Unidad Penitenciaria de Piñero se encuentra al sur de Rosario, la ciudad santafesina que sufre hace años una ola de violencia con episodios que -en muchos casos- se organizan desde la
El inhibidor tiene como objetivo que los detenidos no se comuniquen con el exterior para cometer delitos. Si bien datos oficiales indican que cerca del 80 por ciento de los ataques que sacuden a Rosario se ordenan desde el interior de las prisiones, especialistas estiman que esa cuota se eleva al 95 por ciento de las balaceras y extorsiones en esa ciudad.
La tecnología fue desarrollada por el INVAP con aparatología proveniente de Israel, país pionero en el desarrollo de tecnología para la defensa y la seguridad, detalló el ministro de Seguridad de esa provincia, Claudio Brilloni.
El funcionario recordó que la instalación de este sistema es una respuesta al pedido de organizaciones de la sociedad civil y de gran parte del arco político local. Implicó un desembolso cercano al millón de dólares.
El ministro aclaró que la tecnología ya se está aplicando en una etapa de prueba piloto y se comenzó con la fase uno, que es la inhibición total en el interior de la cárcel.
"Hemos empezado con Piñero, pero obviamente vamos a seguir con Las Flores, Coronda y las otras cárceles de Rosario y todo el ámbito de la provincia", detalló Brilloni.
En ese sentido, recordó que a esta nueva tecnología se suman los escáneres corporales y arcos detectores de metales, y que la misma respeta los derechos de los detenidos.
"Las comunicaciones, conforme reza la Constitución Nacional, están garantizadas, habida dado cuenta que hay un régimen de visitas, que la correspondencia se puede llevar adelante si es que así lo desean y, además, en los pabellones tenemos las líneas telefónicas fijas, o comúnmente conocido como teléfono público, desde los cuales se van a poder comunicar", remarcó.
"El objetivo de los inhibidores es que alguien que intente delinquir con el exterior no tenga ningún tipo de comunicación", finalizó sobre una problemática usual con periódicas muestras en Rosario y con algunos episodios espectaculares.
En junio de 2021, un golpe finamente organizado -desde la cárcel, según los especialistas- permitió que 15 presos se fugaran del penal de Piñero. Siete de ellos fueron rápidamente recapturados, pero ocho permanecieron prófugos. Entre ellos, el objetivo de esa maniobra.
Se trata de Claudio Javier "Morocho" Mansilla, un jefe criminal que manejaba desde esa cárcel una banda con peso en un sector de la zona oeste de Rosario. Tiene, además, vínculos con otros actores fuertes del delito local relacionados con el narcomenudeo y alejados, por ejemplo, de bandas como "Los Monos".
Mansilla fue recapturado en junio de 2022. Ahora, un año más tarde, el gobierno provincial instaló el inhibidor de señales en la Unidad Penitenciaria 11 de Piñero.
Si bien el caso más espectacular fue la fuga de 2021 -con tiros, organización desde la cárcel, un auto para once y una persona muerta-, la organización de delitos desde detrás de las rejas es un problema acuciante en Santa Fe.
Otro hecho llamativo, la balacera contra un supermercado de la familia de Antonela Roccuzzo, esposa de Lionel Messi, también estuvo planificada desde la cárcel, al igual que el sangriento crimen de "Jimi" Leguizamón, el cadáver mensajero que arrojaron en la puerta de la cancha de Newell's, un caso por el que este mismo jueves -cinco meses después- detuvieron al principal sospechoso.
En enero de 2023, el fiscal Pablo Socca, miembro de una Unidad creada especialmente en 2020 para trabajar sobre tiroteos y amenazas, aseguró que "cárcel es el origen del noventa y cinco por ciento de las balaceras y las extorsiones" en Rosario.
Restricción de celulares en las cárceles, un reclamo repetido por la oposición
En un informe sobre delitos de 2022, la Procuraduría de Narcocriminalidad (PROCUNAR) requirió un control estricto de las comunicaciones telefónicas que pudiera mantener la persona detenida "a través del teléfono de línea fija que resulta de acceso público para la población penitenciaria y de otros medios de comunicación habilitados".
Entre otros puntos, repetía la incorporación de inhibidores de señal, aunque lamentaba que sus pedidos anteriores aún tenían "respuesta disímil por parte de los magistrados".
Además de otros sectores de la organización civil, también actores de la política nacional vienen elevando sus reclamos para restringir o controlar el uso de celulares en las cárceles.
Este jueves, Horacio Rodríguez Larreta se expresó en ese sentido en un acto que compartió con Maximiliano Pullaro, ganador de la interna de Juntos por el Cambio por la gobernación santafesina.
En la presentación de un plan integral en materia de seguridad en Rosario, el precandidato presidencial de JxC y actual jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires desplegó un listado de 14 puntos de su propuesta", denominada "Revolución de la Seguridad en Argentina".
Uno de esos ítems es la construcción de módulos de máxima seguridad en las cárceles con inhibidores de señal para incomunicar a los líderes de las organizaciones criminales.
DS
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