¿Pueden robarte dinero en el metro o la calle con un datáfono portátil si tienes una tarjeta contactless?

Tecnologia RDN
Lectura
El dinero físico ha muerto. Desde hace dos años ya se realizan más pagos a través de tarjetas bancarias. El dinero de plástico, tras varias décadas a manos de los ciudadanos, se
ha impuesto. Por lo general, y salvo que se tengan incorporadas en el monedero digital del teléfono móvil, muchas personas la transportan en sus carteras, muchas veces en la parte de atrás del pantalón. En los últimos años ha circulado una serie de vídeos que aseguran que una persona malintencionada puede robarte el dinero de una tarjeta «contactless» -sin contacto- través de un TPV o datáfono portátil. La pregunta es lógica: ¿hasta qué punto es cierto? La respuesta rápida es: posible pero no viable. En los últimos años se han extendido las tarjetas de este tipo, que cuentan con un chip que permite realizar pagos con la tecnología «contactless», que a su vez ha dado inicio a una era de pagos móviles por medio de los chips NFC -comunicación de campo cercano- que incorporan algunos «smartphones». Se trata de una función que convierte a las tarjetas en algo más cómodas porque tan solo hay que acercar la tarjeta a un terminal de pago para hacer la transferencia en un comercio, pero ha despertado el miedo en una parte de la población por esta característica, pensada para que sea funcional, puede poner en bandeja nuevos robos. Por regla general, la entidad bancaria establece que los importes hasta un máximo de 20 euros no requiere de introducir la contraseña o pin. Una decisión que se ha cambiado durante la pandemia del nuevo coronavirus Covid-19: se ha extendido hasta 50 euros para evitar el contacto con la mano de las tarjetas reduciendo así un posible contagio. La posibilidad de robar dinero a través de un TPV portátil con solo acercarlo a la cartera sin que el propietario de la tarjeta se dé cuenta es remota. Fuentes de Policía Nacional han asegurado a ABC que no tienen constancia de ninguna denuncia sobre un caso similar y lo califican de «bulo». Lo primero porque cada vez más los usuarios pagan a través del «smartphone», con lo que exige iniciar el proceso de transferencia mediante una contraseña numérica, pin o a través de los sistemas biométricos que permita desbloquear el móvil. Con lo que el uso de tecnologías como Apple Pay, Samsung Pay o Android Pay prometen una mayor seguridad en los pagos. La distancia es clave Robar dinero con un TPV a través de acercarlo a una tarjeta física “contactless” es una técnica de robo difícil. Una de las razones es porque estos terminales de pago tienen un tiempo limitado para introducir la cantidad a cobrar. Aunque se trata de pagos sin contacto, ambos equipos deben estar a un máximo de 10 centímetros como máximo para poder autorizar la transferencia, según fuentes del Centro Criptológico Nacional (CCN-Cert), dependiente del Centro Nacional de Inteligencia (CNI). A su vez, también existe algo lógico: la mayoría de usuarios porta varias tarjetas de todo tipo con lo que el sistema no sabe discriminar la tarjeta adecuada. Deja un rastro al supuesto estafador Otro de los problemas de esta supuesta técnica de robo es que los TPV están asociados a una única cuenta bancaria para poder ingresar el dinero transferido, con lo que un robo dejará el rastro del ladrón, detectándolo fácilmente. Toda la transferencia quedaría registrada desvelando su identidad. Expertos consultados por este diario aseguran que el robo no sería imposible. El ladrón debe saber dónde está la tarjeta «Sí se puede hacer, aunque es poco probable que te pase porque no les merece la pena a los ladrones. Pero pasar no le veo ningún problema», asegura Luis Corrons, experto en seguridad informática de Avast. «Vas al final a una tienda y sacas la tarjeta al punto de venta, y punto. Y si quieres puedes acercar la cartera sin sacarla. Si tienes varias tarjetas se supone que hay un mecanismo de anticolisión para evitar esto, aunque depende de cara tarjeta. Lo normal es que no funcione», añade este experto. «El terminal de punto de venta, además, tiene que estar a nombre de alguien y está asociado a una cuenta, con lo cual tienes localizado al ladrón. La vida de esto es muy corta. Para cobrarte tienen que meter la cantidad y acercártelo al lado de la cartera donde tengas la tarjeta, es decir, tienen [por los ladrones] que saber dónde la tienes o en su defecto tener suerte, además de en un tiempo muy limitado de tiempo. No lo veo probable, pero se puede hacer sin problemas», considera. Además de esto, desde BBVA insisten en que las tarjetas de tipo «contactless» son seguras y cuentan con sistemas de bloqueo. Un sistema de seguridad preventiva añadido que consiste en bloquear la tarjeta y pedir el PIN en el caso de que se detecte un número determinado de operaciones con importes sospechoso.

FUENTE DIARIO ABC:

https://www.abc.es/tecnologia/consultorio/abci-pueden-robarte-dinero-metro-o-calle-si-tienes-tarjeta-contactless-datafono-portatil-202005111217_noticia.html