Escándalo en España con los chats de ex militares: "No queda más remedio que empezar a fusilar a 26 millones de hijos de..."

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La nostalgia franquista y el deseo de fusilamientos de unos chats de ex militares de las Fuerzas Armadas que se volvieron públicos agitaron los ánimos este jueves en

target="_blank">España, donde la futura ley de memoria democrática que el gobierno de Pedro Sánchez espera aprobar el año que viene condenará cualquier tipo de exaltación de Franco y de los abusos cometidos por su dictadura.

La conversación de WhatsApp, que fue dada a conocer por el diario digital español InfoLibre, incluye la consideración de un golpe militar que luego fue desestimado por los mismos integrantes de “la XIX del Aire”, como bautizaron el chat los militares retirados del Ejército del Aire, la Fuerza Aérea española.

“No queda más remedio que empezar a fusilar a 26 millones de hijos de puta”, señala uno de los mensajes que habría escrito el general de división retirado Francisco Beca, quien fingió demencia cuando fue consultado y aseguró no saber de qué le estaban hablando.

“Yo prefiero la República porque tendremos más oportunidades de repetir las maniobras del 36 (en alusión al golpe y la represión que se desencadenó después)”, se dice en otro mensaje del chat que reúne a egresados de la Academia General del Aire.

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“Quiero que se mueran todos y toda su estirpe”, se insiste.

“Que unos señores, ya jubilados, digan en un chat ciertas cosas no supone ninguna amenaza. Amenaza quien puede, no quien quiere”, dijo este jueves el vicepresidente segundo del gobierno de coalición y líder de Unidas Podemos, Pablo Iglesias.

La ministra de Defensa, Margarita Robles, envió a la Fiscalía del Tribunal Superior de Justicia de Madrid el intercambio de mensajes. Foto: dpa

La ministra de Defensa, Margarita Robles, envió a la Fiscalía del Tribunal Superior de Justicia de Madrid el intercambio de mensajes. Foto: dpa

Sin embargo, la ministra de Defensa, Margarita Robles, envió a la Fiscalía del Tribunal Superior de Justicia de Madrid el intercambio de mensajes para que se evalúe si pueden considerarse delito.

“Ese chat se creó hace casi dos años en plan amistoso entre antiguos miembros de la 19º promoción”, dijo el teniente coronel del Ejército del Aire retirado José Ignacio Domínguez, quien participaba en ese grupo de WhatsApp.

Lo integraban unos 40 ex miembros de los promoción que, en total, reunía a unos 72 militares.

“A partir de las elecciones de hace un año, el chat se empezó a radicalizar, a politizar. En noviembre del año pasado, me fui”, contó Domínguez en un programa de radio en el que admitió que luego sus colegas le pidieron volver al grupo y lo hizo.

“Coincidiendo con la radicalización de Vox (el partido de ultraderecha español), comenzaron a mandar mensajes muy violentos”, dijo Domínguez y aseguró que el líder de Vox, Santiago Abascal, les dejó un mensaje de voz: “‘Hola, soy Santi Abascal. Me han dicho que este grupo merece ser saludado. Un abrazo para todos y ¡Viva España!’, decía en su audio”.

El escándalo de los chats se suma a las dos cartas que decenas de altos cargos militares, ya jubilados, enviaron al rey Felipe VI para denunciar que España está en manos de “un gobierno social-comunista apoyado por filo-etarras e independentistas”.

“Setenta y tres ex militares pueden mandar cartas a quien les de la gana y eso tiene una significación política -opinó el vicepresidente Iglesias-. Si esto lo hubieran hecho mientras estaban en el cargo, hubiera tenido consecuencias disciplinarias. Pero eso nunca lo hubieran hecho. Porque hacen falta valor y agallas.”

Iglesias, que no oculta su republicanismo en contra de la monarquía, opinó: “Creo que la carta al rey sitúa a la monarquía en una situación incómoda. Si unos señores franquistas piensan que rodeando de franquismo al jefe del Estado le están haciendo un favor, no entienden que eso tal vez contribuya a que haya cada vez más españoles que se sientan republicanos”.

Según el líder de Podemos, “no me cabe ni la más mínima duda de que (el rey Felipe VI) ni va a leer la carta”.

Un juez emérito del Tribunal Supremo español, José Antonio Martín Pallín, se permitió reflexionar sobre el contenido de los chats con una ironía: “Los generales que quieren fusilar a ’26 millones de personas’ tienen libertad de expresión gracias a aquéllos que fueron fusilados”, aseguró Martín Pallín.

Madrid. Corresponsal