El Gobierno compró 20 millones de carnets de vacunación, pero el principal distrito no los usará

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"Payasada". Así definió el presidente Alberto Fernández, desde México, el hecho de que se continúe hablando del vacunatorio VIP. De ese entramado de vacunas que se asignaron de forma

irregular para allegados al Gobierno y que funcionó en el Ministerio de Salud de la Nación y en el Hospital Posadas.

Pero el mismo día del escándalo que terminó en la salida de Ginés González García y antes del cambio de postura de Fernández, que ahora busca dar por cerrado el tema, las sacudidas autoridades sanitarias del país tomaron una medida de urgencia para disminuir "errores programáticos" del plan de vacunación contra el coronavirus: la compra de 20 millones de carnets, por más de 30 millones de pesos. ¿Cuánto ayuda a la transparencia que existan estos carnets?

La flamante ministra de Salud, Carla Vizzotti, autorizó la compra de carnets para certificar la aplicación de la vacuna contra el Covid-19. Pero en Provincia de Buenos Aires, jurisdicción con la mayor población del país y territorio del gobernador Axel Kiciloff, no los van a usar.

"Provincia no necesita. Será para la vacunación que haga Nación, o para distritos que tengan sistemas arcaicos", dijeron a Clarín desde el Ministerio de Salud bonaerense, donde, aseguran, tienen "el sistema de vacunación más avanzado del país".

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Desde el primer día de vacunación, a fines de diciembre, la Provincia entrega un carnet con un código QR a través del cual la persona inoculada puede "ver su historia y recibir información". Es una hoja que dice Vacunate PBA y, como mostró el propio Kiciloff, también un carnet celeste, como una tarjeta.

Pero si Carlos Zanini, procurador del Tesoro de la Nación, muy cercano a la vicepresidenta Cristina Kirchner, recibió la primera dosis de Sputnik V el mismo día que Alberto Fernández, el 21 de diciembre, y en el mismo lugar, el hospital Posadas -que aunque esté en Provincia, depende de Nación-, habiendo sido anotado como "personal de salud", cuando él es abogado, y sin turno previo, ¿esta ventaja en la fila podría evitarse al tener un carnet único e intransferible? Es la promesa. No hay detalles técnicos ni administrativos que expliquen cómo podría  evitar la malversación de las dosis.

Lo claro es que en la Ciudad de Buenos Aires, como confirmaron a Clarín, sí se implementarán. "Por orden de Nación, es para todos", dijeron. Incluso cuando quienes fueron y son inyectados, al igual que en Provincia, también les entregan una constancia donde figura qué dosis recibieron, cuándo, dónde y de qué marca.

El nuevo carnet de vacunación que compró la Nación.

El nuevo carnet de vacunación que compró la Nación.

Si bien fue publicada el lunes en el Boletín Oficial, la resolución 7/2021 tiene fecha del viernes, el día que se conoció el vacunatorio VIP habilitado por el exministro. Se trató de una de las últimas resoluciones de Vizzotti como secretaria de Acceso a la Salud. El costo total por la compra de los carnets, según lo informado, es de 30.940.000 pesos.

"Apruébese la contratación por emergencia Covid-19 Nº 10/2020 para la adquisición de carnets destinados a certificar la vacunación y que se ha completado el esquema adecuado, colaborando en la disminución de errores programáticos y facilitando el registro de las personas vacunadas, así como también el Pliego de Bases y Condiciones Particulares que como Anexo PLIEG-2021- 01940212-APN-DCYC#MS forma parte integrante de la presente medida", marca el artículo primero de la resolución.

Según el modelo de carnet que figura en el Anexo II, las cartulinas blancas de 22x15 centímetros que se imprimirán y darán forma a este documento no cuentan con numeración específica que evite su alteración o réplica ni un código QR. Solo hay información general sobre qué hacer ante la presencia de síntomas y los siguientes campos a completar "a mano": datos personales del vacunado, el motivo de indicación de la vacunación, la marca de la vacuna, las dosis recibidas, el número de lote, la fecha de vacunación, la fecha de la próxima dosis y el vacunatorio. En tanto, en la resolución ni siquiera se hace mención a la obligatoriedad de un sello. 

Hay dos firmas que se quedaron con la licitación: Javier Hernán Pérez Romero, para 2 millones de carnets, por $ 3.040.000; y 18 millones de carnets adjudicados a Gráfica Latina, a cambio de $ 27.900.000. La primera entrega de carnets, el 25% del total, debe realizarse al Estado dentro de los próximos 10 días.

Según se explica, dar estos carnets a las personas vacunadas "permitirá contar con un seguimiento del plan de vacunación", que será parte del programa que la ministra le presentó al jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, con dos objetivos: "generar la trazabilidad de cada vacuna una vez que ingresa al país" y "elaborar un documento en la Comisión Nacional de Inmunizaciones "que deje bien asentado quiénes serán "los grupos prioritarios para recibir la vacuna".

Desde la cartera de salud nacional comunicaron que se creará una comisión que se encargará de monitorear la trazabilidad de la vacunación del personal estratégico -los funcionarios- y estará integrada por reconocidos expertos en inmunización, bioética, salud y derechos.

También se resolvió especificar la definición técnica sobre los alcances de función en el Estado, riesgo y exposición del personal estratégico, quienes además deberán solicitar autorización previa a la cartera sanitaria para acceder a la vacunación. Pero no se hizo mención a los carnets, que excederían al personal estratégico. De hecho, en la lista del vacunatorio VIP hay empresarios, periodistas, expresidentes y sus hijas y familiares de dirigentes sindicales, todas personas ajenas a la función pública. 

Este miércoles, la ministra Vizzotti puso en marcha el Monitor Público de Vacunación, un registro al que se puede acceder online y que muestra en tiempo real información sobre el operativo nacional de vacunación contra Covid-19.

Dice cuántas dosis se dieron, a qué grupo y cuántas están por llegar. Pero tampoco hay allí información sobre los carnets adquiridos ni cómo sumarán transparencia al plan de vacunación.

AS