Una mujer argentina que se había quemado gravemente murió en Chile: su familia no pudo ir a despedirla

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Tras agonizar durante dos semanas en un hospital de Antofagasta, Chile, una mujer salteña que sufrió gravísimas quemaduras en su cuerpo cuando explotaron recipientes con un líquido inflamable que

aparentemente utilizaba para la limpieza de pisos, murió en la mañana de este jueves.

Se trata de Lucía Walter, de 33 años, quien sufrió quemaduras en más del 50% de su cuerpo. Tras accidentarse en Calama, Walter fue trasladada a un hospital en Antofagasta y finalmente a un establecimiento de mayor complejidad en Santiago, pero no resistió.

"Fue una tragedia horrorosa. Explotaron los órganos. Se quedó sin rostro, sin pechos. Fue horrible. Lo peor es que no pude consolarla, acompañarla por la maldita pandemia. Ahora nos encontramos todos juntos en Salta rezando, sin saber que hacer. Nos resta seguir esperando”, sostuvo con mucho dolor Gabriela Ortiz, su mamá.

Según precisó el diario salteño El Tribuno, la madre de la víctima contó que "explotaron unos recipientes con líquido inflamable utilizado para la limpieza de pisos" y que "las llamas fueron inclementes y afectaron más del 50 por ciento de su cuerpo".

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Para la familia de Lucía fue "una pesadilla" intentar acompañarla, y no lo consiguieron. "No hubo forma, buscamos por todos lados, pero a todos los trámites normales se sumaba el aislamiento obligatorio", contó la mamá de la mujer fallecida.

También agregó: "Fue mucha la gente que se movilizó en un primer momento para poder hallarla". A Lucía la buscaron a través de grupos de WhatsApp de salteños en Chile, y luego un consulado argentino gestionó que la trasladaran a Santiago.

El padre de Lucía consiguió viajar a Antofagasta en un avión de la provincia de Salta. Fue un viaje exprés para buscar a su nieto, el pequeño hijo de Lucía que había quedado allí.

"Fue y volvió, apenas llegó al aeropuerto estaba mi nietito. Así que pegaron la vuelta. No sabemos cómo vamos a afrontar todo esto. Es muy doloroso, mi nieto sufre de asperger", detalló la mujer, según cita El Tribuno.

Lucía era profesora de Artes Plásticas y había viajado a Chile en enero pasado. "Ya había montado su atelier en Calama. Amaba el arte, la música. Era una soñadora. No tuve la posibilidad de darle un beso en la frente, de despedirme. Hoy tengo las manos vacías", concluyó con mucho dolor la madre de Lucía.

LGP