Martín Guzmán cree que puede desplazar a Federico Basualdo, el hombre del kirchnerismo que desafía al ministro

Economia
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El ministro de Economía, Martín Guzman, planteó semanas atrás al Presidente una reestructuración del área de energía. Incluía la remoción del subsecretario de Energía Eléctrica, Federico Basualdo, un sociólogo que cuenta

con el apoyo del kirchnerismo más duro y está en contra de aumentar las tarifas en la magnitud que el Guzmán solicita. Cristina Kirchner y Axel Kicillof lo respaldan.

Alberto Fernández dio luz verde al pedido de su ministro. Pero no hablaron de fechas.

El tiempo pasó, en el medio Guzmán viajó por Europa a negociar con el Club de París, y este viernes el tema resurgió. Aunque no de la manera que el Gobierno imaginó.

El Ministerio de Economía deslizó ayer al mediodía y por su cuenta, que Basualdo se iba y habría dos subas de tarifas de luz en 2021. En total 15%. No hubo comunicados pero voceros de las áreas ratificando la información.

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La respuesta del kirchnerismo llegó: hablaron de “operación” y que Cristina Kirchner impidió que Basualdo se fuera. No aceptarán un aumento de más de 9%. 

Apenas llegó a Buenos Aires de su gira, Guzmán se topó con un dato elocuente: las cuentas fiscales de marzo mostraron que los subsidios (que van a la clase media) crecen al 70% mientras que el gasto social lo hace sólo al 32,4%. Hay que hacer algo porque sino el déficit crecerá más, cree el ministro.

Basualdo y La Cámpora pretenden un aumento de las tarifas de un dígito. No más de 9%. Para que los subsidios energéticos se mantengan en la misma proporción actual del PBI -es lo que dice Guzmán-, se necesita una recomposición en una franja de entre 30% y 40%. Guzmán impulsa ahora 15%. La Cámpora insiste con el 9%.

El miércoles Guzmán conversó con Cafiero. Mano a mano. Hablaron de Club de París y volvió surgir el affaire Basualdo.

Al subsecretario le llegaron rumores sobre la iniciativa Guzmán. Y que ya no lo tendría en cuenta. Basualdo tiene banca.

Economía entendía ayer que su posición era de fortaleza ante una movida semejante, la de desplazar a Basualdo, porque contaba con el visto bueno de la Rosada. Dejó entonces trascender el pedido de renuncia al subsecretario, además de subir tarifas más que lo que el subalterno del ministro había dicho públicamente.

En el Gobierno respaldan a Guzmán y su hoja de ruta. Justifican que lleva racionalidad a la agenda de la economía del Presidente. La diferencian de los aumentos de Macri de más de 100%. Pero hay desconcierto por la manera con la que el ministro Guzmán se manejó para resolver esa reestructuración de su cartera en Energía. Basualdo es un subsecretario. “Se debería haber sentado a conversar con él y no operar a través de los medios”. Aún así mantienen su apoyo al ministro y creen que Basualdo terminará yéndose.

Continuará.