En Washington advierten sobre el impacto de la carta que indica al Presidente cómo negociar con el FMI

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La proclama que lanzó este martes un grupo de personalidades identificadas con el kirchnerismo más duro, en la que piden al presidente Alberto Fernández que suspenda los pagos de la deuda

por la pandemia y una serie de condiciones para negociar con el Fondo Monetario Internacional, tuvo impacto en Washington.

Ante una consulta del Clarín sobre el tema, el Fondo no quiso comentar al respecto. Pero expertos que siguen de cerca las tratativas argentinas con el FMI en Washington señalaron a esta corresponsal que el documento “socava la credibilidad” de un compromiso que pueda firmar el Gobierno y que es una “continuación del esmerilamiento” que un sector del kirchnerismo le hace al ministro Martín Guzmán, encargado de las negociaciones con el organismo. Muestra, además, que cualquier acuerdo que pueda alcanzarse puede ser "anulado" por "acciones internas del cristinismo".

Un grupo de políticos, actores y periodistas publicaron este martes una “Proclama del 25 de mayo” para decirle a Alberto Fernández cómo negociar con el FMI. Pide la suspensión de los pagos por capital e intereses al organismo y al Club de París por la pandemia; que se renegocien los vencimientos y se baje la sobretasa de interés; apoyar la investigación a funcionarios por el crédito otorgado en 2018 y la fuga de capitales, entre otras cosas.

La carta llega en un momento delicado para la negociación de la deuda porque la semana que viene hay un vencimiento con el Club de París y la entidad europea exige para postergarlo que la Argentina muestre el aval de un plan con el Fondo. Como ese acuerdo en Washington parece postergarse hasta después de las elecciones, el gobierno de Fernández busca un gesto del organismo que sirva de luz verde al Club de París. Si bien hace pocos días el presidente había dicho que no quiere un default y que querría acordar pronto con el Fondo, la Proclama del 25 de mayo puede complicar esta perspectiva.

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“Es una declaración que ignora los costos que tendría caer en default con el mundo y que pone al desnudo las desinteligencias dentro del espacio político del propio gobierno”, dijo a Clarín Héctor Torres, ex director argentino ante el Fondo.

La proclama, agregó, “claramente socava la credibilidad de cualquier compromiso que pueda tomar el Gobierno con los acreedores públicos e indica las dificultades que tendría un acuerdo con el FMI de recibir aprobación legislativa”.

Torres advierte que este documento “puede tener repercusión concreta: no hay una frontera entre la política externa y la interna, menos todavía cuando desde el propio espacio político del Gobierno se pide que el Estado desconozca la legitimidad de la deuda contraída por un gobierno anterior”.

El experto cree que la proclama puede complicar un apoyo del Fondo para las actuales negociaciones argentinas con el Club de París. “Ayudar, seguro que no ayuda. Tal vez lo más grave sea mostrar que en Argentina, cualquier compromiso tomado por un gobierno podría ser desconocido por el siguiente. Aun cuando se traten de gobiernos legítimamente elegidos”.

Para Gabriel Lopetegui, ex director argentino ante el FMI, “este mensaje es más para el Presidente que para el Fondo. El panorama está complicado porque la inflación no baja, hay un cierre de todo que va a afectar las cuentas fiscales y claramente hay una pelea que sigue. Yo creo que es una continuación del esmerilamiento que le han hecho al ministro Martín Guzmán y que le complica políticamente las negociaciones”.

Lopetegui señaló a Clarín que “en el Fondo ya saben que la coalición no está de acuerdo básicamente en un plan económico. Esto es una muestra más de ese desacuerdo, pero la verdad que no creo que por ese comunicado cambie mucho la percepción que ya existe: que la Argentina está en una situación políticamente muy difícil para acordar, y menos ahora. No creo que nadie imagine que va a haber un programa con el Fondo antes de las elecciones porque ya debía haber ocurrido”.

Claudio Loser, ex director para el Hemisferio Occidental del Fondo, dijo que “evidentemente, la proclama busca poner límites a la capacidad del Gobierno para encontrar una solución negociada y razonable con quien es su principal acreedor”.

Añadió que “claramente esto muestra una fisura y el peligro de que si el equipo del gobierno llega a un acuerdo con el personal del FMI, puede anularse el compromiso alcanzado, por acciones internas del “cristinismo”. En términos prácticos, lo más probable, es que esta proclama permita a los firmantes proteger sus credenciales oficialistas, cuando se llegue a un acuerdo”.

“Si por otra parte el Gobierno considera que estas son sus instrucciones, es casi seguro que no se llegue a un acuerdo, el país entre en atrasos con el FMI y ello lleve a una suspensión de las negociaciones, y eventual incapacidad de pedir prestado. Este es un tema que puede llevar unos meses, pero más allá de la negociación técnica, habrá menos simpatía por la Argentina de parte de otros países miembros, si no hay una posición de buena fe en la negociación. En resumen, una situación delicada, pero manejable, si este anuncio es solo retorico. Pero no ayuda”, señaló.

El documento, que tiene 10 páginas y fue adelantado este martes por Clarín, fue impulsado por la diputada Fernanda Vallejos, una economista que es la titular de la comisión de Finanzas de la cámara baja y una de las voceras de la vice sobre las negociaciones con el FMI. Cuenta con firmas de personalidades como el ex juez de la Corte Suprema Eugenio Zaffaroni; el secretario general adjunto de Camioneros Pablo Moyano; el secretario general de la CGT Héctor Daer; el periodista Víctor Hugo Morales; el vicepresidente de la UIA Guillermo Moretti; la ex ministra de Economía Felisa Miceli; el ex vicepresidente Amado Boudou; los gobernadores de Tierra del Fuego Gustavo Melella y de Formosa Gildo Insfrán, entre otros.

"Nuestro país se encuentra en una situación de 'estado de necesidad' que le impide afrontar los compromisos de deuda contraídos, especialmente con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y otros organismos”, dice.

Y propone al presidente siete puntos básicos para la negociación: 1) "Impulsar la suspensión de los pagos por capital e intereses con el FMI y el Club de París, mientras se extienda la emergencia sanitaria".

2) "Reprogramar los vencimientos con todos los organismos financieros internacionales con plazos acordes a las verdaderas posibilidades de pago del país".

3) "Renegociar la disminución de intereses, cargos y comisiones previstos en los acuerdos vigentes".

4) "Utilizar la cuota que le correspondería a la Argentina (estimada en aproximadamente 4.350 millones de dólares), de la emisión esperada de Derechos Especiales de Giro (DEG) por parte del FMI de USD 650.000 millones totales, para fortalecer las reservas internacionales del BCRA, aliviando las restricciones que limitan la atención de los graves problemas derivados de la pandemia Covid-19 y privilegiando la salud, educación, vivienda, trabajo, reducción de la pobreza e indigencia, entre otros y no al pago de la deuda por capital, intereses o gastos".

5) "Apoyar la querella criminal iniciada por el Gobierno Nacional contra los funcionarios actuantes del anterior gobierno en la obtención del préstamo 'stand by' con el FMI".

6) "Investigar el destino de los fondos de dicho préstamo para identificar a los responsables de la fuga de capitales, puesta en evidencia por la investigación del Banco Central de la República Argentina".

7) "Exigir al FMI que brinde todo el apoyo para continuar con las investigaciones, determinar y diferenciar deuda legítima de ilegítima y que, asimismo, colabore en encontrar los fondos fugados del país".

Washington. Corresponsal