Para la Cámara de Comercio "hay frustración y desilusión" con el Gobierno

del año pasado”, a partir del comienzo de la semana hábil, este miércoles. “Y no será porque se les haya ido el susto que genera la pandemia, lo que ocurre es que el enojo está superando el riesgo que se corre”, agregó.

En diálogo telefónico con Clarín, desde Entre Ríos, Grinman aseguró que “hay frustración y desilusión” por parte de su sector hacia el Gobierno, “porque muchos pensaban que para esta época del año un porcentaje importante de argentinos iba a estar vacunado, y eso no pasó. Y en cambio, se volvió a las restricciones, pero no por una cuestión de prudencia, sino porque se hizo todo mal. Y lo que se ve desde acá es que hay que seguir pagando la fiesta de otros”.

Este martes hubo distintas marchas de protesta contra las restricciones en varios puntos del país. En algunas ciudades como Córdoba, Bariloche y Tucumán, se trató de protestas encabezadas por los comerciantes.  

Según datos de la CAC, desde la pandemia cerraron unos 100.000 comercios, con la pérdida de entre 150.000 y 170.000 puestos de trabajo, sólo en este sector. Grinman dijo que, antes de las nuevas restricciones, el sector comercial estaba trabajando "20% por debajo de la prepandemia" y que el sector en su conjunto viene atravesando una crisis de ventas "desde 2010 para acá". 

Tras un fin de semana largo en el cual muchos comercios abrieron sus persianas y mantuvieron su actividad, aunque sin permitir el ingreso de clientes a sus locales, Grinman planteó es que parte del descontento.

"El acatamiento (a las restricciones) es dispar, por las protestas de mucha gente que está enojada o cansada de ver cómo el Gobierno mira para otro lado cuando no se cumple con las normativas en manifestaciones de todo tipo, pero a la vez se obliga al cierre de las empresas, a pesar de que cumplen con todos los protocolos necesarios", agregó el empresario.