Después de esperar más de ocho horas por una ambulancia, una mujer decidió llevar a su papá -que sufre de cáncer en los huesos- en silla de ruedas hasta el hospital
en medio de la noche.
Eduardo Ledesma, que vive en el partido de Merlo, provincia de Buenos Aires, comenzó a empeorar su estado de salud pasado el miércoles al mediodía, cuando el dolor en los huesos producto del cáncer no le permitía ni moverse de la cama.
Fue ahí que su hija hizo el primer llamado al teléfono 107 local, para pedir una ambulancia de emergencia. Lo primero que le respondieron fue que el sistema estaba colapsado y que no tenían móviles disponibles. Pero les prometieron asistencia en cuanto se desocupe alguno de los vehículos.
Algunas horas más tarde la familia volvió a comunicarse, la respuesta fue la misma aunque expresaron que no tenían información sobre algún llamado anterior para esa misma dirección.
Lorena llevando a su papá hasta el hospital en una silla de ruedas prestada.
"A todo esto también llamamos a PAMI. Mi papá estaba cada vez peor. Nadie nos atendía ni nos daba respuesta. Nos abandonaron", cuenta Lorena, la hija de Eduardo, todavía angustiada.
Fue a pedir ayuda a los bomberos y la policía, pero le dijeron que no podían hacer nada. Ya entrada la noche, decidieron llevar al hombre por sus propios medios.
El problema es que Eduardo pesa más de 100 kilos y a esa altura el dolor era tan agudo que no podía apoyar un pie en el suelo. Por ende la opción de cargarlo y subirlo al auto era imposible.
"Tuvimos que pedirle prestada una silla de ruedas a un vecino y, como pudimos, lo sentamos a mi papá. Lo abrigamos con una frazada y lo llevamos. Fueron 15 cuadras desde la casa hasta la clínica", relata Lorena.
Otros integrantes de la familia viajó en el auto, desde atrás, para poder alumbrar el camino con las luces. Fue uno de ellos quien grabó parte del trayecto que debieron hacer hasta el hospital y que publicó el sitio Merlo Real Noticias.
Durante la conversación con Clarín la mujer aclara que no quiere hacer política con este hecho y pide en reiteradas oportunidades que algo así no le vuelva a pasar a nadie: "Nos decían que no había ambulancias. Bueno... si no hay ambulancias, tienen que buscar la forma de ayudar a los vecinos, no abandonarlos de esta manera", exige.
Una vez que entraron hasta el hospital San Juan de Dios, el médico que los atendió se mostró sorprendido por la forma en que llegó el paciente: "Nos preguntó por qué habíamos esperado tanto en llevarlo. Parecía una broma, pero le contamos y quedó asombrado por la falta de respuestas del servicio de emergencias".
Finalmente Eduardo fue atendido y ahora se encuentra internado con oxígeno porque, según le explicaron, el corazón no latía con fuerza. También se encuentra con neumonía y líquido en los pulmones.
"La desidia, la falta de interés y el abandono que hicieron con mi papá fue muy cruel. Te podés estar muriendo en tu casa que nadie parece querer ayudarte. Espero que ninguna persona vuelva a pasar lo que yo he pasado yo con mi papá”, cerró Lorena.
DD
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