Reflotar la Celac: ¿Un plan para desplazar a la OEA en la región?

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Cuando las principales delegaciones regresaban a sus países tras asistir a la cumbre de la Celac en la capital mexicana, un pensamiento común ganaba espacio como un resultado concreto del encuentro:

la idea de que ese cónclave buscará desplazar a la OEA.

Y la certeza de que ese intento es alentado por el presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador reflotando viejas ideas del extinto líder venezolano, Hugo Chávez.

Los presidentes y representantes de los 33 países miembros de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) celebraron el último sábado una rápida cumbre en México, en la que se formularon exigencias a que EE.UU. cambie su relación con la región, se discutieron planes para combatir la pandemia, el cambio climático y las dificultades económicas.

Sin embargo, el debate se acaloró más que todo cuando algunos jefes de Estado, como los presidentes de Paraguay, Abdo Benítez, y el de Uruguay, Luis Lacalle Pou, cuestionaron frontalmente al venezolanoNicolás Maduro, quien arribó de sorpresa luego que se había anunciado que no participaría.

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Luis Lacalle Pou en la cumbre de Mpexico. Foto Reuters

Luis Lacalle Pou en la cumbre de Mpexico. Foto Reuters

Contra Maduro

La reelección en el 2018 del líder chavista no fue reconocida por Estados Unidos, la mayoría de países latinoamericanos y la Unión Europea que alegaron que el proceso de votación se realizó sin cumplir los mínimos estándares democráticos.

Benítez y Lacalle Pou cuestionaron la legitimidad democrática del jefe de Caracas, planteos a los que sumaron también críticas a Nicaragua y Cuba como Estados que reprimen a los disidentes y encarcelan a opositores.

Venezuela está lista para debatir sobre democracia, con respeto, sin exclusiones”, replicó Maduro, desafiando a sus críticos a “un debate sobre la democracia”.

El presidente cubano Miguel Díaz-Canel también tuvo un intercambio de palabras con Lacalle Pou a quien acusó de desconocer la realidad de Cuba y defendió el coraje del pueblo de la isla para enfrentar por seis décadas el embargo comercial de Estados Unidos.

El presidente venezolano, Nicolás Maduro (frente), hablando durante en la Cumbre. Foto XInhua

El presidente venezolano, Nicolás Maduro (frente), hablando durante en la Cumbre. Foto XInhua

Justamente, el papel de EE.UU. en la región fue uno de los temas que introdujo en la agenda, al inicio del cónclave, el anfitrión López Obrador. El mexicano exigió a la Casa Blanca el fin de las políticas de embargo y una “nueva y vigorosa relación entre los pueblos de América”.

Y rescató una vieja idea de Hugo Chávez para impulsar la integración regional al margen de la OEA, a la que se cuestiona por considerarla “obsoleta e ineficaz” y siempre inclinada a servir a los intereses de EE.UU., como dijo el presidente de Bolivia, Luis Arce.

Contra la OEA

Para sustituir a la OEA, Lopez Obrador propone la necesidad de “construir en el continente americano algo parecido a lo que fue la comunidad económica que dio origen a la actual Unión Europea”.

Agregó que este ideal sería posible si se llega a acuerdos sobre tres cuestiones básicas: la no intervención y la autodeterminación de los pueblos, la cooperación para el desarrollo y la ayuda mutua para combatir la desigualdad y la discriminación.

El canciller mexicano, Marcelo Ebrard, fue aún más fuerte planteando incluso que ya es hora de decirle “adiós OEA en su sentido intervencionista, injerencista y hegemonista”.

El respaldo a la Celac, frente al papel de la OEA, estuvo reflejado en la importancia de la presencia del presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, y de los mensajes en video de apoyo remitidos por el presidente de China, Xi Jinping, y del secretario general de la ONU, Antonio Guterres.

El presidente mexicano abraza algunas de las viejas causas del chavismo, mientras pretende ocupar el vacío de liderazgo en la región, en un momento en que el Brasil de Jair Bolsonaro apenas presta atención a los asuntos internacionales tras haberse retirado de la Celac en enero de 2020 afirmando que “da protagonismo a regímenes no democráticos”, en alusión a Caracas, Managua y La Habana.

La Celac es un organismo creado en 2011, con el impulso de Hugo Chávez y que agrupa a 33 países de América Latina y el Caribe, sin incluir a Estados Unidos y Canadá. En la última década, el organismo apenas ha tenido protagonismo hasta que el Gobierno mexicano lo rescató.

Desde Miami, la organización de exiliados venezolanos (Veppex) declaró a Obrador “persona non grata” por su “apoyo y reconocimiento a los dictadores Nicolás Maduro y Miguel Díaz-Canel”.

Fuente: AFP, AP, EFE y Clarín

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