El jugador del pueblo

orgullo de Calchín, pasó por el Estadio Kempes dejando la certeza de que es futbolista del momento en Argentina y también la incógnita sobre si lo volveremos a ver tan cerca en un campo de juego.

“Los jugadores tienen sus tiempos y me parece que a Julián aún le queda un margen para seguir haciéndose en el fútbol argentino”, declaró Rodolfo D’Onofrio, el presidente del Millonario, en su paso por Córdoba. Así les bajó los decibeles a los rumores que vinculan al delantero de 21 años con cinco clubes extranjeros: Milan de Italia, Bayer Leverkusen de Alemania, Aston Villa de Inglaterra, Valencia de España y Ajax de Holanda.

Julián Álvarez ganó cuatro títulos en la primera de River Plate: la Copa Libertadores de América en 2018 y la Copa Argentina, la Supercopa Argentina y la Recopa Sudamericana en 2019

“Por su inteligencia y su velocidad Álvarez es un futbolista que puede jugar en cualquier liga del exterior”, sostiene Piero Foglia, el cazatalentos que descubrió a “la Araña” en las inferiores de Atlético Calchín y lo sumó al proyecto de formación del Deportivo Atalaya. “No hay dudas de que tiene un futuro europeo y de que se irá más temprano que tarde”, puntualiza.

“No debe errar en la elección. Eso es lo más importante. Julián tiene que ir a un club que tenga un proyecto similar al de River y un DT como Marcelo Gallardo, para no alejarse de la selección”, dice Foglia. Cabe recordar que en el último mercado de pases, River y el jugador desestimaron ofertas de Orlando City y Atlanta United, clubes de la Major League Soccer (MLS).

Un “9” indescifrable

Contra Talleres, Álvarez estuvo a punto de hacer un gol olímpico, perdió un mano a mano con Guido Herrera, asistió a Brian Romero en la jugada del definitorio 2-0 y le sacó astillas al travesaño con un zurdazo desde afuera del área. El Kempes fue testigo de su jerarquía y también de la confianza que le tienen su DT y su equipo.

En un juego que se le hizo incómodo por la temprana expulsión de un compañero, el “9” se las ingenió para desequilibrar en inferioridad numérica ante la defensa contraria.

“Es el jugador del momento”, asegura Gustavo Gutiérrez, comentarista de Cadena 3. “Me recuerda aquello de ‘cuando entro, salgo; y cuando salgo, entro’ que decía ‘el Flaco’ Menotti, porque el pibe hace eso. Nunca le da referencia al que lo marca y es muy difícil de controlar”, explica el periodista.

“Esa movilidad que tiene hace que su marcador siempre dude, porque en teoría lo tiene cerca y cuando toca de primera y sale a buscar el espacio ya lo tiene lejos. Y cuando lo perdió, lo perdió”, puntualiza.

Con la camiseta argentina, "la Araña" de Calchín jugó el Mundial Sub de Polonia en 2019, ganó el Preolímpico Sub 23 de Colombia en 2020 y se consagró en la Copa América de Brasil 2021.

“La genética de Julián se vincula con la habilidad, la velocidad, la visión de juego y la definición”, apunta Piero Foglia, quien antes de llevarlo a River lo hizo probar en Real Madrid y Boca. “Desde chico fue inteligente en la toma de decisiones y muy goleador, y progresó mucho en la dinámica y en la búsqueda de espacios”, enfatiza.

“Algo muy bueno es que siempre está en posición expectante. Inclusive en un partido adverso, como fue el que se dio ante Talleres, tuvo tres situaciones para convertir”, añade.

La tierra de Julián

Desde hace varios días el cartel no pasa inadvertido para quienes transitan por la Ruta Provincial 13. Señala el ingreso a Calchín, localidad del departamento Río Segundo ubicada a 110 kilómetros de la capital cordobesa. Junto al nombre del pueblo, su escudo y la leyenda “bienvenidos” sobresalen las imágenes de un futbolista. “La tierra de Julián Álvarez”, puede leerse sobre un fondo que semeja la estética de Spiderman.

“Realmente es increíble pensar que el mejor delantero del fútbol argentino sea de nuestro pueblo, de Calchín. Es un orgullo enorme para nosotros y sobre todo para los hinchas de River, que lo disfrutamos cada fin de semana”, señala el exfutbolista y entrenador Germán Martelotto.

HIJO DILECTO. Calchín destacó al delantero de River y del seleccionado argentino poniendo su imagen en el cartel que señala el ingreso al pueblo.

“Creo que este presente es el momento que Julián soñó muchos años atrás. Siempre quiso ser un jugador de elite y alguna vez también lo escuché decir que su ilusión es jugar un Mundial, y en ese sentido siento que va por buen camino”, agrega “el Tato”, quien en 1991 vistió la camiseta “10” de Argentina en un amistoso ante Inglaterra en Wembley.

Sobre el potencial de “la Araña”, Martelotto dice: “Es un futbolista de nivel internacional y muy completo, ya que se ha adaptado a distintas posiciones. Tiene todas las condiciones para triunfar y sobre todo un carácter especial. Es un tipo de perfil bajo y sumamente dedicado a su profesión”.