Elconflicto mapuche en Chile es uno de los principales problemas a los que se enfrenta la presidencia de Gabriel Boric, por lo que ahora analiza implementar el “estado intermedio” en las
zonas de mayor tensión. Sin embargo, el grupo Coordinadora Arauco Mapuche (CAM) desafió al presidente chileno y amenazó con “organizar la resistencia armada”.
Según la agencia de noticias ANSA, el líder de la CAM, Héctor Llaitul, llamó a “preparar las fuerzas, organizar la resistencia armada, por la autonomía y por el territorio” en respuesta a la decisión del Gobierno de Chile de proteger con militares las zonas críticas de La Araucanía, es decir 670 kilómetros al sur de Santiago de Chile.
Mientras tanto, Boric se resiste a decretar el Estado de Emergencia, tal como implementó su predecesor Sebastián Piñera, razón por la cual propuso establecer un “estado intermedio”, que habilitaría a los militares a custodiar las rutas.
La lucha de los pueblos originarios fue uno de los principales ejes de campaña de Boric.
Llaitul, por su parte, consideró que esto “no es otra cosa que un nuevo estado de excepción, es decir los milicos esbirros nuevamente desplegados por el Wallmapu custodiando los intereses del gran capital”.
Así, continuó con sus declaraciones y definió a la estrategia como “la expresión en pleno de la dictadura militar” y disparó: “La dictadura que ahora asume el gobierno lacayo de Boric”.
De esta manera, convocó a las comunidades que luchan contra las empresas forestales y contra el Estado chileno por la restitución de las tierras ancestrales a participar de la resistencia.
En paralelo, la gestión de Boric confirmó que duplicará el presupuesto para la compra de tierras para indígenas, lo que permitiría saldar parte de la deuda histórica que tiene el Estado chileno con los pueblos originarios.
Las idas y vueltas en el gobierno de Boric
La situación dentro del Congreso chilenotambién es conflictiva, ya que algunos sectores que conforman el oficialismo también se oponen a la declaración del estado intermedio, lo que deja la puerta abierta a que los otros partidos hagan sus propias propuestas en las cámaras, según informó el diario local La Tercera.
De esta manera, la declaración de “estado intermedio” provocó una interna dentro del oficialismo chileno entre el Partido Comunistay las demás agrupaciones que conforman la alianza.
El Partido Socialista, por su parte, apoyó la idea de implementar esta estrategia en la zona de conflicto, por lo que los miembros del partido destacaron la importancia de “restablecer en lo posible la paz en La Araucanía y también hacerse cargo de los temas de seguridad pública”.
