Vladimir Putin se metió en la campaña electoral en Italia: "Tenemos mucho por recordar"

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Italia vive horas decisivas de cara a las elecciones del próximo domingo 25. En la recta final, los partidos de derecha lideran los sondeos frente a una desunida izquierda, pero deben

lidiar con una figura que provoca divisiones: Vladimir Putin.

La guerra en Ucrania provocó estragos en la frágil economía italiana y es un tema clave de cara a los comicios del 25 de septiembre. Como si faltara poco, a tres días de la elección la embajada de Rusia en Roma se metió en la campaña con una provocadora publicación que refleja la cercanía de Putin con los algunos de los protagonistas de la contienda electoral, especialmente de la derecha italiana, líder de las encuestas.

El gesto de la sede diplomática se dio en el marco de la escalada bélica en Ucrania, luego de que el presidente ruso elevara la tensión al anunciar la movilización de civiles para contener la contraofensiva ucraniana y la posibilidad de usar armas nucleares.

El giro de Italia hacia el neofascismo

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Vladimir Putin junto al ex primer ministro Giuseppe Conte (Movimiento 5 Estrellas) y sus dos vice primeros ministros de entonces, el euroescéptico líder de la Liga Matteo Salvini y el actual ministro de Asuntos Exteriores Luigi Di Maio (ex 5 Estrellas).

El provocador mensaje de la embajada de Rusia en Italia

"Extractos de la historia reciente entre Rusia e Italia. Tenemos mucho por recordar", escribió con ironía la embajada rusa en Roma junto a las cuatro fotos -cuidadosamente elegidas- que muestran a Vladimir Putin con algunos de los protagonistas de coalición de derecha -favorita en las encuestas-, varios de ellos distanciados desde la invasión rusa de Ucrania.

Entre ellos figuran dos veteranos de la política italiana, el ultraderechista Matteo Salvini y el magnate conservador Silvio Berlusconi, de la coalición favorita según las últimas encuestas previas a la veda, son conocidos por sus estrechos lazos con Vladimir Putin.

Salvini, un profeso simpatizante del líder ruso e incluso llegó a usar una remera con su imagen, se mostró en contra de las sanciones económicas a Rusia tras la invasión a Ucrania. Por su parte, Berlusconi, de 85 años y candidato a senador, visitó la región anexada de Crimea, pero ahora se ha distanciado tras el ataque a Ucrania.

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Putin dándole la mano a Matteo Renzi, quien fue jefe de gobierno de 2014 a 2016 y que ahora lidera un pequeño partido de centro.

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La publicación de las fotos desató numerosos comentarios, entre ellos una reacción mordaz del ex ministro de justicia de izquierda Piero Fassino: "Si no hubieras tomado la decisión de invadir un país libre e independiente, que nunca te amenazó, podrías haber continuado tu colección de fotos con nuestros jefes de gobierno".

El doble standard de la política italiana frente a Putin

A pesar de las históricas buenas relaciones entre Rusia e Italia, especialmente entre las élites políticas asociadas a la derecha, existió un consenso en la condena “con firmeza” a la agresión rusa el pasado 24 de febrero que coincidió con la decisión de enviar armas a Ucrania por parte del primer ministro saliente, Mario Draghi. No obstante, es un tema que provocó divisiones a nivel intrapartidario.

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Putin junto al exprimer ministro Enrico Letta, actual líder de centroizquierda y candidato a premier.

Mientras Salvini presiona para que se suavicen las sanciones contra Moscú, por considerarlas ineficaces y contraproducentes, Giorgia Meloni, su compañera de coalición y líder del partido posfascista Fratelli d'Italia (Hermanos de Italia), que domina las encuestas, defiende las sanciones a Rusia así como el envío de armas a Ucrania.

La antigua estrategia italiana, de jugar en varias bandas, con la Unión Europea, la OTAN y Estados Unidos, y al mismo tiempo mantener el diálogo con Putin es probable que regrese con el nuevo gobierno que, en línea con los últimos sondeos, será de derecha.