Tras la salida del príncipe Enrique de la corona británica, la princesa Ana debió asumir uno de los roles más importantes las Fuerzas Armadas de Reino Unido: las tropas anfibias de
La hija de la reina Isabel IIse convirtió en la primera mujer en ocupar el cargo de capitán general de los Royal Marines. De esta manera, rompió con una de las tantas tradiciones y se enfrentó al antiguo mito de los piratas sobre las mujeres en los barcos.
La princesa Ana, junto con el antiguo duque de Sussex.
El mito pirata
La historia presenta a los barcos británicos como los líderes de los mares, pero este poder que alcanzó Gran Bretaña empezó con los piratas que recorrían las aguas para encontrar riqueza y venderlas al mejor postor.
Según se creía, el barco llevaba el nombre de una mujer, por lo que ninguna otra podía abordarlo, para evitar la “furia” y “celos” del navío. Por esto mismo, que una mujer sea pasajera de algún buque representaba un “mal augurio” para los tripulantes.
El papel de la princesa Ana
Pese a que la corona de Gran Bretaña tiende a seguir las tradiciones gracias a las que se gestó su poder, el reinado de Isabel II modernizó algunas cuestiones de la realeza.
En ese sentido, una vez que el príncipe Enrique renunció a ser miembro de la monarquía, su puesto como jefe de los Royal Marines quedó vacante y la decisión real fue que Ana asuma este cargo, que anteriormente solo fue ocupado por hombres.
Sin embargo, no es el primer título militar que la princesa posee, ya que recibe es almirante honoraria de Royal Navy, la marina; general del Ejército británico y mariscal en jefe del aire de la Royal Aire Force, es decir la Fuerza Aérea.
La princesa Ana es conocida como uno de los miembros más "trabajadores" de la realeza británica.
Además, dirige diez regimientos, incluido el de coronel en jefe de los Hússares Reales del Rey, los Gurkhas y el cuerpo veterinario del Ejército real.
Ahora, más allá de las tradiciones y del mito pirata, lidera las tropas anfibias de la marina, una tropa de élite, optimizada para una respuesta rápida en todo el mundo, es decir que trabajan “totalmente integrados con los barcos anfibios de la marina”, de acuerdo con la información del Gobierno británico. Además, estos comandos son definidos como “expertos en operaciones de barco a barco”.
