13 de octubre, Día Mundial de la Visión

Salud
Lectura

La consulta temprana o los controles periódicos oftalmológicos son esenciales para prevenir daños oculares que llevan a la ceguera. La concientización sobre los diferentes tipos de afecciones visuales muchos prevenibles y

curables. En esta nota, hablamos sobre Glaucoma y Ambliopía en niños.

Glaucoma en la infancia

El glaucoma es una enfermedad del nervio óptico en la cual perdemos fibras nerviosas y que puede llegar a la ceguera. Su factor de riesgo más frecuente es el aumento de la presión intraocular. En el mundo, al día de hoy, es la causa de ceguera irreversible más frecuente. O sea, que la persona ciega por glaucoma no puede volver atrás. Su diagnostico temprano y su tratamiento precoz son fundamentales para prevenir la ceguera. La diferencia es enorme.

Glaucoma y estudios que oculares 20220310
La detección temprana es clave.

Existe el glaucoma en los niños, dos son sus formas de aparición. Al nacimiento, y ya el pediatra o el neonatólogo lo sospechan y hacen la consulta oftalmológica. Este tipo es sumamente raro y debe ser de resolución urgente. Habitualmente quirúrgica. También pueden aparecer en niños más grandes, y también es muy poco frecuente. El oftalmólogo lo descubrirá en la consulta por molestias o necesidad de anteojos del niño. Una cosa a tener en cuenta es que muchos de los estudios que en los adultos hacemos en forma muy simple en el consultorio, con los niños se dificulta, ya que es lógico que no se dejen tocar la cara y menos los ojos. Esta difícil colaboración hace que ciertos exámenes deban ser realizados bajo anestesia general, de muy corta duración y hoy muy bien manejada por los anestesistas. Es una práctica que en estas circunstancias es habitual.

Estos glaucomas son debidos a una mala formación del ojo del niño que lleva a un mal drenaje del líquido que regula la presión intraocular. Su rápida resolución, habitualmente quirúrgica, es fundamental. Hay varias formas de clasificarlos, pero la más simple podría ser en congénitos (o sea al nacimiento) y congénito tardío (también de origen congénito pero de aparición más tardía).

BANER MTV 1

Ambliopía en la infancia

El ojo y el cerebro desarrollan la visión en los primeros años de vida. Y es muy importante ver bien, en foco, durante este tiempo de maduración de la vía óptica.

La ambliopía es la pérdida o disminución de visión en un ojo que tuvo potencialidad de desarrollar buena visión, pero que por alguna causa le fue impedido. Obviamente se hará el tratamiento pertinente (darle lentes, operar la catarata o el párpado) y, si fuera necesario, hacer el tratamiento específico de la ambliopía. Estimularemos la visión del ojo que no está usando tapándole el ojo sano. Obligándolo a trabajar al ojo enfermo, para que de esa forma mejore su visión. Por todo esto es tan importante controlar la visión de los niños a edades tempranas con un oftalmólogo.

Semana Mundial del Glaucoma: una patología silenciosa, pero totalmente prevenible

Al ojo vago es lo que se denomina ambliopía. Es un ojo que por mal desarrollo de la visión ve mal. Un ejemplo frecuente es el ojo desviado en un niño con estrabismo. Si se lo trata adecuadamente y en el tiempo correcto puede desarrollar buena visión.

Los niños que necesitan corrección (aumento) de un solo ojo o que tienen mucha diferencia entre los ojos pueden desarrollar mal el ojo al que le cuesta más ver, al de más aumento, por la misma causa. Ver borroso durante el período de desarrollo visual. Si tuviera el párpado caído, o una catarata pasaría lo mismo. Son situaciones en las cuales uno de los ojos ve borroso cuando debería ver nítido durante el período de desarrollo visual. Es fundamental realizar el diagnóstico en edad temprana y el tratamiento adecuado.

*MN 67724 - Oftalmólogo. Médico de planta del Hospital Durand, Unidad Oftalmología. Fundador y ex presidente de Asoc. Argentina de Glaucoma ASAG)