Avanzan a buen ritmo las urbanizaciones que se vienen desarrollando en distintos sectores de la ciudad de Córdoba y también del interior. Esta iniciativa forma parte de un ambicioso plan de
infraestructura que lleva adelante el Gobierno provincial y a través del cual se integrará definitivamente a más de un centenar de barrios, mejorando la calidad de vida a unas 34 mil familias.
La ministra de Hábitat y Economía Familiar, Laura Jure, indicó que las obras tienen un marcado foco en lo urbano y social al promover el acceso a los servicios públicos, mejores condiciones de salud y fortalecimiento comunitario.
“Nadie elige vivir en un lugar sin luz, sin cordón cuneta o sin desagües; por eso trabajamos para que las vecinas y vecinos tengan una mejor calidad de vida y un mejor hábitat en su barrio”, expresó.
Las urbanizaciones contemplan la construcción de redes de agua potable, cloacas y energía eléctrica, así como conexiones domiciliarias, veredas y cordón cuneta. Además, se revalorizan los espacios verdes, se busca la remediación ambiental, la instalación de contenedores domiciliarios y se optimizan las condiciones de accesibilidad.
“La infraestructura es clave para dar un salto en la calidad de vida de la barriada y para que sean barrios como Dios manda”, resaltó el gobernador Juan Schiaretti, al tiempo que aseguró: “Nos parece que debe estar allí presente el Estado, dándoles la posibilidad a esas barriadas de que mejoren, haciendo las inversiones necesarias”.
Actualmente, en la Capital y en un trabajo articulado junto a la Municipalidad de Córdoba, hay 13 barrios transformados: Cabildo 2, Comunidad Renó, Villa La Tela, Villa Inés, Campo de La Ribera, El Trébol, El Bosquecito, Barranca Yaco, El Tropezón -1ra Etapa, Villa Unión, Las Magdalenas, Ampliación Las Magdalenas y Los Chapones. Y 39 obras en ejecución. En el interior se terminaron las obras en Saldán y Carlos Paz y hay más de 50 en desarrollo.
Pamela es una de las vecinas de Las Magdalenas, al sureste de la ciudad, donde vivir ahora es una experiencia muy diferente. “Antes –recordó- llevar los niños al colegio implicaba pasar por el barro. Hoy llueve y ya no sabemos lo que es tener agua en las calles ni en nuestras casas”.
Llegar al barrio de manera integral. Las obras varían de sector en sector porque responden a las necesidades específicas y urgentes de acuerdo al relevamiento que se realiza en el lugar, junto a vecinos y organizaciones comunitarias. De allí que se avance, por ejemplo, con estaciones transformadoras, nexos cloacales, y además se fortalezcan las actividades económicas familiares, el redimensionamiento parcelario y la seguridad en la tenencia.
De esta manera, se acompaña simultáneamente a las miles de familias alcanzadas por el programa para que regularicen su situación dominial. En este sentido, uno de los objetivos es que vecinas y vecinos terminen los trámites de escrituración y puedan así acceder a sus títulos de propiedad.
