Laura Giordano, de 41 años, vio que su hija y su nuera estaban discutiendo fuertemente e intentó separarlas. Pero el empujón de la novia de su hijo hizo que cayera de
espaldas sobre una bicicleta apoyada a una pared y se desnucó.
El hecho conmocionó a la comunidad de Las Heras, Mendoza, y los allegados de la víctima mostraron su dolor en las redes sociales.
El trágico hecho ocurrió este martes cuando Brenda Ávila comenzó a discutir con su cuñada de 16 años. La pelea se había originado por la organización de la limpieza de una vivienda.
Al ver la discusión, la suegra, Laura, quiso intervenir para separarlas. Sin embargo, recibió un empujón de la nuera que hizo que su cabeza diera sobre una bicicleta apoyada en una pared y terminó desnucada.
La mujer quedó inmóvil en el suelo y sus familiares intentaron reanimarla pero sin éxito. La trasladaron al hospital Carrillo pero la víctima ya no tenía signos vitales. En ese marco, los médicos señalaron la causa de muerte como dudosa ya que no tenía lesiones visibles en el cuerpo. Luego, cuando la policía allanó la casa tampoco encontraron rastros de sangre.
De todas maneras, el fiscal ordenó la detención de Brenda Ávila en la comisaría 36 de Las Heras. El fiscal de Homicidios Carlos Torres, imputó a la joven por “homicidio preterintencional” luego de que admitiera que empujó a la víctima. La autora del crimen fue trasladada al penal de mujeres de la provincia.
Finalmente, mediante la autopsia, los peritos del Cuerpo Médico Forense confirmaron que la causa de muerte fue por desnucamiento. Aparentemente, al caer sobre la bicicleta, se produjo un latigazo cervical que causó la muerte instantánea.
El dolor de los familiares de Laura Giordano
“Hoy sí nos despertamos con la peor noticia. Solo te pedimos que les des fuerzas a tus pequeños hijos, que los ayudes a salir adelante. Lo importante es que solos no están, acá estamos todos para apoyarlos. Vamos a hacer justicia”, expresó la sobrina de la mujer que compartió su dolor en Facebook.
En esa línea, agregó: “Siempre vamos a recordarte con tus risas. Vamos a extrañar tus ‘hola, mamita‘. Que en paz descanses, querida Laura. Siempre presente, hasta pronto”.
Amanda Díaz, vecina de Laura, también lamentó: “Qué dolor me da tu partida. Con solo saber que ayer te vi jugando con tus niños bajo la lluvia, con solo ver tu sonrisa en los rostros de tus niños y, ahora, saber que no estás. Que Dios te tenga en la gloria. Fuiste una gran vecina y una gran mujer para mí. Que descanses en paz”.
