“Hay que arrancar, los melones se acomodan sobre la marcha” dijo el General.
El lanzamiento de la candidatura del Diputado provincia Juan Carlos Ayala para la intendencia de Sáenz Peña produjo un movimiento tectónico
“Hay que arrancar, los melones se acomodan sobre la marcha” dijo el General.
El lanzamiento de la candidatura del Diputado provincia Juan Carlos Ayala para la intendencia de Sáenz Peña produjo un movimiento tectónico
en el anquilosado estatus quo del peronismo de la termal porque todo venía funcionando bien, “dirigentes” que gozan del “arreglo” financiero son dueños de una prosperidad notoria y permanente desde hace más de treinta años, con el radicalismo en la intendencia y un peronismo para
pocos, tienen una canilla abierta de recursos sin dar explicaciones, Ayala viene a mover el avispero en las bases que cada vez están más excluidas del proyecto económico de sus dirigentes. Situación similar presentaba la localidad de Barranqueras donde un grupo de “dirigentes peronistas” tenían cerrado “el paquete” con Alicia Azula quien en una explosión de omnipotencia dijo que “a los peronistas se los compra con dos pollos”, pero como en política nunca está todo dicho, Juan Carlos Ayala logró la cohesión en las bases y con un fuerte trabajo militante conquistaron Barranqueras que presenta una gestión sumamente exitosa con Magda Ayala como jefa comunal. El equipo pretende recuperar la intendencia de Sáenz Peña y replicar el modelo que se desarrolla en Barranqueras con obras, infraestructura, promoción y ascenso social con trabajo y producción, valor agregado, no es una tarea fácil pero con trabajo militante es muy posible, tal es así que se encuentran desarrollando plenarios barriales que nuclean viejos y jóvenes referentes del peronismo que se encuentran cansado del arreglo y la componenda hundidos en la pobreza y la exclusión mientras un sector se llena los bolsillos con edificios, departamentos y contrataciones en desmedro de la militancia de base.
En síntesis la movida que está llevando a cabo “El Negro” Ayala ya rompió la parálisis y como dijo el General “Hay que arrancar, los melones se acomodan sobre la marcha”.
