Más problemas para Alves: le piden una indemnización millonaria y le abandonan los patrocinadores

que la jueza viera indicios de delito tras la denuncia de la presunta víctima, que acusó le acusó de agresión sexual en la discoteca Sutton de Barcelona la madrugada del 30 al 31 de diciembre de este año pasado. Al grave problema al que se enfrenta el futbolista, que podría tener que afrontar una pena de entre 4 y 14 años de cárcel, se le suma el distanciamiento con su esposa (se asegura que le ha pedido el divorcio, aunque no lo ha confirmado oficialmente) y ahora la cuantiosa cantidad económica que le exige el club Pumas , en el que militaba y que decidió rescindirle de forma inmediata el contrato en cuanto salieron a la luz los supuestos abusos sexuales. Según informa el medio 'UOL Sporte', el mismo que ofreció una entrevista en exclusiva con la abogada de la víctima, el club mexicano le exige una indemnización millonaria por violar los términos de conducta que incluía su contrato, a pesar que el brasileño no ha sido condenado aún y está tratando de demostrar su inocencia. Pumas le condena de antemano y le exige el pago de 5 millones de dólares, unos 4,5 millones de euros. El citado medio ha tenido acceso al correo electrónico que el conjunto de la Liga MX le hizo llegar al futbolista el pasado 20 de enero (el mismo día de su detención). En él, se amparan en la cláusula que penaliza al jugador por su participación en casos de dopaje, «en cualquier escándalo que se haga público» o en «cualquier acto que sea considerado delito según la legislación del país en el que haya tenido lugar». «Por incumplimientos muy graves del jugador, en los términos previstos en las cláusulas decimocuarta y decimoquinta del contrato, el jugador está irremediablemente obligado a reembolsar al club el pago de la indemnización prevista en la cláusula decimoquinta del contrato, en el monto de 5 millones de dólares netos , o sea, libres de todo impuesto o retención», relata Pumas en el correo electrónico. No es el único impacto económico que puede sacudir la cuenta corriente de Alves, ya que sus patrocinadores no quieren asociar su imagen a la del futbolista. Hay que recordar que en el auto en el que se le condenaba a prisión provisional se calculaba que, además de su sueldo como futbolista , Alves podía cobrar entre 30.000 y 50.000 euros cada tres meses en derechos de imagen. Al menos tres empresas han dejado de pagar a Alves y han borrado su imagen de las publicaciones de las compañías. La primera en anunciarle que le congelaba el contrato fue 1xPartner , que se puso en contacto con los abogados del jugador el pasado 23 de enero para decirle que durante cuatro meses, al menos, no le abonarían las cantidades pactadas, aunque aseguraron que no le reclamarían los 400.000 euros que ya le habían abonado hasta la fecha. Eso sí, le ha borrado de sus anuncios y redes sociales. La compañía financiera brasileña Hygia Saúde hizo lo mismo un día después y además, le exigió que retirase de sus redes sociales todas las publicaciones que afectaran a su marca. Y por último, fue la marca de ropa Ethika , la que el 25 de enero le comunicó que «no realizaremos ninguno de los pagos hasta que esté libre de carga», al tiempo que avisaban que «no podemos seguir usando su imagen con la situación actual». No obstante, el golpe más duro lo ha recibido a través de Adidas , la empresa de ropa deportiva que le vestía y que le reportaba el contrato publicitario más importante. No obstante, este acuerdo tenía fecha de caducidad, un mes después del Mundial de Qatar , que coincidió con el supuesto suceso de violación, lo que ha provocado que la marca alemana no le renueve. Hasta la fecha, Alves había sido imagen de Adidas durante los cuatro últimos años. Noticias Relacionadas estandar No Joana Sanz, la mujer de Dani Alves, hundida: «La falta que me haces» Laura G. Calleja estandar No Alves sostiene que los vídeos de la discoteca «desmienten de forma radical» la versión de la víctima ABC La defensa Alves está trabajando para demostrar que no hubo violación sino relaciones consentidas y se basan en las pruebas de vídeo para intentar desmontar la versión de la víctima, que ha asegurado que no quiere ningún tipo de pacto ni de compensación y que su único propósito es que «se haga justicia». Los abogados del futbolista consideran clave que en las imágenes de las cámaras de seguridad de Sutton se ve cómo la joven entra en el baño dos minutos más tarde que Alves, supuestamente por voluntad propia, según han filtrado.