Eleonora Gosman contó cómo se llevó a cabo la detención de algunos policías militares acusados de omisión en el plan de seguridad del 8 de enero pasado, y deslizó la posibilidad
de que Jair Bolsonaro arribe a Brasil antes de lo previsto. "Él dice que cuando venga será una oposición moderada, pero no es creíble", afirmó en Modo Fontevecchia, por Net TV y Radio Perfil (FM 101.9).
En Brasil se detuvieron policías responsables de omisión dolosa, ¿podrías profundizar un poco más?
Entre ellos hay un alto funcionario, Jorge Eduardo Naime Barreto, un coronel de la policía militar, no del Ejército. Esta policía es controlada por el estado provincial. La detención tiene que ver con el hecho de que era el jefe de Operaciones de ese organismo en el Distrito Federal, y que se pidió una licencia desde el 3 de enero hasta el día posterior al ataque a la Plaza de los Tres Poderes. Esto lo vuelve sospechoso, porque quizás lo hizo para no quedar ligado directamente a los sucesos, que tuvieron un alto grado de violencia.
Lo llamativo es que entre los detenidos está el ex ministro de Justicia de Jair Bolsonaro, Anderson Torres. pero no hay personal del Ejército en esas condiciones.
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¿Cuál es la situación de Bolsonaro en todo esto? ¿Corre riesgo su vida personal o política?
Él está en el centro de todo esto. La Justicia, cada vez más, se va acercando a su figura. El día que vuelva a Brasil desde Estados Unidos se verá qué postura toma, aunque sostiene que será la de una oposición moderada, pero no es creíble, si hay algo que no tiene Bolsonaro es esa moderación que está hablando. De todas maneras, hay diputados demócratas pidiendo que Estados Unidos expulse a Bolsonaro de allá.
Además, pasan otras cosas: el proyecto de Lula era de crecimiento económico, pero el Banco Central brasilero mantuvo una tasa básica de interés elevadísima, de 13,75%. Con esa tasa se paga la deuda interna en reales.
Por tanto, hay una pelea entre el este organismo y Lula, ya que se interpone a su aspiración de crecimiento económico.
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¿El presidente del Banco Central hasta cuándo tiene asegurado su lugar allí?
Dos años. Son incompatibles las ideas de Lula con las del presidente del Banco, Roberto Campos Neto, quien afirma que, como aún hay inflación, hay que combatirla vía tasa de interés. Por su parte, el presidente de Brasil, y varios economistas de renombre, aseguran que no es la forma de combatirla porque se provocará una recesión enorme desfavoreciendo a los sectores más pobres.
Y esto es importante porque el tema de la violencia va a ser resuelto a medida que la Justicia avance, pero esto es lo que afectará en el mediano plazo.
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¿Los hechos de violencia del 8 de enero, al debilitar a Bolsonaro, no le dieron a Lula mayor empoderamiento y fortalecimiento económico?
Sí, es cierto, el problema es que como hay un banco independiente, no puede actuar. No tiene más medios para actuar que aducir que si hay recesión la culpa es de la entidad bancaria.
Aunque, si Lula lo desea, mediante algunas artimañas podría permitir la salida anticipada de Campos Neto. Pero no es momento para hacerlo, recién lleva un mes de gestión.
AO FM
