Retiro: una zona "re picante" donde a nadie le sorprende que hayan matado a una mujer policía

Policiales
Lectura

En la cinta naranja que rodea la boca de acceso a la estación Retiro de la línea C de subte, se lee la inscripción “escena del crimen, no pasar”. El asfalto hierve

bajo el sol de la siesta en Retiro. Una paloma muerta corona una de las pilas de basura que hay en la zona. “Venís a trabajar, pero no sabes si volvés a tu casa”, dice un delegado.

Este es el clima que se vive en la zona donde Gustavo Oscar Vakdez (29) mató a la oficial de la Policía de la Ciudad Maribel Nélida Zalazar (35). Un sector complejo, por el que todos los días pasan cientos de miles de personas, con las paradas de colectivos, la estación de subte, las terminales de trenes y la entrada al Barrio 31.

"Vi asaltos, robos de celulares, de todo", cuenta Ricardo. Sentado en un cajón de madera que tiene un respaldo y asiento azul de silla de computadora encima, vende portatarjetas de seis de la mañana a seis de la tarde todos los días en la entrada de la Estación. "Me voy moviendo para esquivar al sol". Esta vez, tuvo que moverse cuando se instaló el cordón policial en la boca del subte.

El crimen ocurrió en la entrada a la estación Retiro de la línea C de subte. Foto Juano Tesone
El crimen ocurrió en la entrada a la estación Retiro de la línea C de subte. Foto Juano Tesone

Un grupo de mujeres que pasa todos los días por este lugar, se ríe irónicamente cuando Clarín les pregunta si suelen ver policías. Después, contestan: “Un policía arriba, quizás, y algún otro abajo (en el subte)”, contestan. Una de ellas, Ximena, cuenta que a ella ya la asaltaron dos veces.

“Después de las seis de la tarde esto es tierra de nadie”, es una frase que repiten los trabajadores de Emova, al empresa que concesiona el servicio, Ximena y Nahir, otra de las mujeres que pasan todos los días por Retiro.

BANER MTV 1

El delegado de la línea C se llama Jorge Luis Borges y es guarda. Cuenta que una vez, trabajando, le rompieron el vidrio. Tienen, además, compañeros que fueron golpeados, a otros los asaltaron.

Miles de personas pasan todos los días por Retiro. Foto Juano Tesone
Miles de personas pasan todos los días por Retiro. Foto Juano Tesone

“En redes sociales, circula un video de algunos vendedores ambulantes peleándose a cuchillazos dentro de la estación”, agrega el representante de la Línea C.

Otras personas que se acercan a preguntar qué pasó a la policía, no parecen sorprendidas cuando se les narra el episodio.

“Todo queda asentado en actas, cada hecho de violencia, también hicimos varias denuncias a la Subsecretaría de Trabajo, pero no tuvimos ninguna respuesta concreta”, dice Borges. Por el asesinato de la Policía, todas las líneas están de paro hasta las 0 de este martes.

“Esta policía estaba sola, ellos tendrían que estar en parejas o en equipo”, expresan algunos empleados de Emova.

El lugar es complejo por la cantidad de medios de transporte y la cercanía con Barrio 31. Foto Juano Tesone
El lugar es complejo por la cantidad de medios de transporte y la cercanía con Barrio 31. Foto Juano Tesone

Los domingos o los feriados son tremendos, no hay una sola persona que nos cuide. Somos trabajadores en relación de dependencia y eso es algo que tendrían que proveernos: seguridad", agregan. 

Incluso en medio del operativo policial por la tragedia ocurrida, pocas horas después, la policía presente puede contarse con los dedos de las manos: cinco policías federales que cuidan el cordón, otros dos parados más lejos. De la Ciudad, solo hay algunas agentes de tránsito. Esos son todos los oficiales a la vista en la parte exterior de la Estación de Retiro.

"Cuando pasa algo así, mandan muchos policías una semana, pero venís en quince días y ya no hay nada", afirma una de las representantes de la línea D. "Dicen que no hay policía, que están o en el operativo en la playa o cualquier otro lugar”.

Antonella lleva de la mano un nene de cuatro años que quiere ir al baño, “mi papá es taxista, hace una semana vino a traer un pasajero, cuando volvía se paró en el semáforo, ahí los cartoneros le robaron el celular”, cuenta.

La Policía valló la zona del ataque. Foto Juano Tesone
La Policía valló la zona del ataque. Foto Juano Tesone

Antonella e Isabel, dos trabajadoras que pasan con frecuencia por la zona de Retiro, responden contundentes cuando se les pregunta si suelen ver policía: “No”. 

Hace 40 años que Julio trabaja vendiendo churros, bolas de fraile y donas en Retiro. “Antes, hace un par de años, había un poco más de policía. Pero estamos cerca del que ahora se llama Barrio 31, con eso te digo todo, la zona no es picante, es re picante”, dice. 

“Adentro de la estación, hay policía, aquí me siento segura, pero afuera no”, afirma Yamila, quien trabaja en un bar adentro de Retiro. “Aquí adentro, la verdad que no me puedo quejar. Lo que muchas compañeras hacen es tomar el subte y salir adentro de la Estación. Afuera, eso sí, nunca vi policía”. 

MG

Mirá también

"Yo soy el jefe, yo gané": quién es el hombre que le robó el arma a una mujer policía en Retiro y la mató

Quién era Maribel, la policía asesinada cuando quiso frenar una pelea en Retiro