Un agente de Gendarmería Nacional que estaba de civil asesinó de un disparo en la noche de este miércoles a un joven que, según aseguró, intentó atacarlo con un cuchillo luego de
El trágico episodio ocurrió alrededor de las 20, cuando aún había comercios abiertos, en la intersección de las calles Baigorria al 1500 y Medrano al 2300, en el barrio La Cerámica.
Fue en ese lugar que, según la información preliminar, el gendarme de 37 años les ordenó a la víctima fatal y a un cómplice que dejaran de robar cables. No solo no acataron el pedido, sino que uno de ellos se abalanzó con un cuchillo contra el agente, que le disparó en defensa propia con su arma reglamentaria.
El atacante corrió malherido casi 50 metros y cayó sobre el asfalto, donde murió antes de que llegara la ambulancia. El otro joven huyó corriendo de la escena del crimen, donde luego llegó personal del gabinete criminalístico a las órdenes de la Fiscalía en turno.
"Eran dos, estaban robando cables en la otra cuadra. Este muchacho gendarme les dijo: 'Eh, ¿qué están haciendo?'. Entonces uno se le fue encima y el gendarme le disparó. Creo que estaban con un cuchillo, para poder cortar los cables. Escuché un solo disparo", contó un vecino de la zona en diálogo con Telefé Rosario.
La fiscal Gisela Paolicelli, de la unidad de Homicidios Dolosos del Ministerio Público de la Acusación, dio intervención a la División de Investigación Judiciales y Administrativas de la Agencia de Control Policial (ex Asuntos Internos) y a la División de Homicidios de la Agencia de Investigación Criminal para que analicen las cámaras de seguridad de la zona y reúnan testimonios de los vecinos.
Un policía mató a uno de los seis motochorros que le quisieron robar
La secuencia es breve, pero estremece. Seis ladrones en tres motos persiguen al joven, que iba en su Rouser 160. Lo alcanzan y la víctima, que era un policía, se arroja y corre. Hay un enfrentamiento a tiros que termina con uno de los asaltantes muerto sobre la vereda.
Todo sucedió el pasado lunes 13 de marzo, alrededor de las 20.30, en la calle Nuestra Señora de la Merced al 3900, entre Bolivia y España, en la localidad de Caseros, partido de Tres de Febrero.
El delincuente que murió fue identificado como Alexis Ricardo Valdez. Tenía 18 años y le decían "Mamu". Vivía en los monoblocks del barrio Carlos Gardel, en El Palomar (Morón).
Valdez recibió un disparo en la cabeza. Según las fuentes, tenía varios antecedentes y un pedido de captura activo por robos reiterados a solicitud del Tribunal N° 5 de Morón.
Poco después, un joven de 24 años se presentó en el Hospital Posadas con heridas de arma de fuego en el abdomen, una pierna y un brazo. Aseguró que había sido víctima de un robo, pero la mentira se descubrió rápidamente: era uno de los motochorros que habían intentado robarle al policía, por lo que quedó detenido.
Lo identificaron como Gabriel Nicolás Giménez, quien contaba con antecedentes por robo y resistencia a la autoridad. ¿Cómo lo descubrieron? Según la Policía, llevaba puesta una sola ojota, que era igual a otra que habían secuestrado en el lugar del asalto.
ES
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