Después de una década de caída en la producción petrolera, Argentina está repuntando de la mano de la consolidación de la formación Vaca Muerta. Un informe de una consultora internacional asegura que
El incremento implicaría triplicar la producción de Vaca Muerta, y casi duplicar la de todo el país. Según la proyección, Vaca Muerta podría generar US$ 20.000 millones por las exportaciones de petróleo. “Las exportaciones pueden ser a países sudamericanos como Brasil, Chile y Perú, pero también a Estados Unidos y a Europa”, manifiesta Rystad Energy, una consultora especializada en energía.
Aunque se viene hablando de US$ 20.000 millones de dólares de exportaciones energéticas en 2030, allí se contempla que eso sea también con gas y otros productos energéticos. En este caso, Rystad entiende que ese objetivo se puede lograr solamente con petróleo. Con el agregado de gas, el boom de exportación de energía podría ser aún mayor.
Por supuesto que todo dependerá del contexto macroeconómico. Las regulaciones, la normalización del mercado de cambios, y la capacidad de movimiento de las productoras y sus proveedores juega un rol clave. “El crecimiento se dará si las empresas cuentan con capacidad para trasladar el petróleo y la disponibilidad de equipos de perforación no limita el crecimiento”, puntualizan.
El pronóstico muestra que Vaca Muerta todavía tiene mucho para crecer, y va a camino a convertirse en una de las principales fuentes de energía no convencional, al estilo de Eagle Ford y Bakken, dos formaciones de Estados Unidos. Eagle Ford y Bakken sacaron a Estados Unidos de cualquier dependencia energética en petróleo, y la convirtieron en exportadora neta de ese commodity.
“Las limitaciones de capacidad para transportar persisten, y la disponibilidad de la plataformas de perforación sigue siendo una preocupación constante”, puntualiza Rystad Energy. “La curva de aprendizaje para los operadores en la cuenca ha sido empinada, y tendrán que continuar esta tendencia para maximizar su potencial de producción. Si todos los participantes de la industria (N. de la R: Gobierno nacional, gobiernos provinciales, legislación proveedores) trabajan juntos para abordar estas limitaciones antes de que se vuelvan críticas, la producción podría superar 1 millón barriles diarios más temprano que tarde”, detallan.
Pasar el umbral
Vaca Muerta es la clave para el desarrollo energético argentino.”Si alcanzan el millón de barriles por día, sería un ‘umbral’ (como logro) que cambiaría la percepción sobre el país, además de reducir la dependencia de las importaciones y convertir a Argentina en un jugador regional clave en el mercado petrolero global”, dice Alexandre Ramos Peon, Jefe de shale research at Rystad Energy.
Durante 2022, Argentina importó casi US$ 5.000 millones más de lo que estimaba en energía. Fue por la invasión rusa a Ucrania, que disparó los precios internacionales. La contracara de eso fue que la salida de dólares convenció al Gobierno de avanzar con la construcción del gasoducto que va de Vaca Muerta a Buenos Aires. Por esa obra, este año se podrían ahorrar más de US$ 1.000 millones, y ese número puede seguir creciendo a medida que haya ampliaciones.
“En febrero de 2023, Vaca Muerta produjo 291.000 barriles. Lo que significa un incremento de 76.000 barriles. La producción de gas también aumentó un 15%.El crecimiento es notable, pero no extraordinario, considerando que se trata de un desarrollo relativamente nuevo”, considera Rystad.
La consultora formula una serie de consideraciones técnicas para los operadores, que ve alcanzables. Eso sí, advierte que el pronóstico puede ser alterado por “cambios macroeconómicos significativos o inestabilidad política en Argentina hacia 2030”.
Los petroleros suelen decir que “la roca” (la que da origen al petróleo y gas no convencional) es de las mejores del mundo. Rystad convalida esa apreciación con gráficos y un análisis. “El rendimiento de petróleo está demostrando ser superior al de pozos horizontales similares en las mayores formaciones de petróleo no convencional de Estados Unidos”.
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