China construirá una estación que podría espiar a EE.UU. desde Cuba

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WASHINGTON - China planea construir unas instalaciones en Cuba que, según tres funcionarios estadounidenses familiarizados con el acuerdo, podrían servir para espiar a Estados Unidos interceptando las señales electrónicas de las instalaciones

militares y comerciales estadounidenses cercanas.

Beijing ha construido puestos de escucha en otros lugares y tiene presencia militar en Cuba, pero una estación de escucha podría dar a China un punto de apoyo a unas 160 kilómetros de la costa de Florida, desde el que podría llevar a cabo operaciones de vigilancia contra Estados Unidos.

Vista de la Embajada de Estados Unidos junto al escenario Antiimperialista en La Habana, Cuba, 24 de mayo de 2023. REUTERS/Alexandre Meneghini
Vista de la Embajada de Estados Unidos junto al escenario Antiimperialista en La Habana, Cuba, 24 de mayo de 2023. REUTERS/Alexandre Meneghini

La proximidad de la instalación prevista a Estados Unidos es especialmente preocupante, según las autoridades, porque podría ampliar la capacidad tecnológica de Beijing para vigilar operaciones delicadas en los estados del sureste, incluidas varias bases militares.

"Estamos profundamente preocupados por los informes de que La Habana y Beijing están trabajando juntos para atacar a Estados Unidos y a nuestro pueblo", dijo el senador Mark Warner, demócrata de Virginia.

Mark Warner, demócrata de Virginia, y Marco Rubio, republicano de Florida, que dirigen el Comité de Inteligencia del Senado, dijeron en una declaración conjunta el jueves.

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"Estados Unidos debe responder a los continuos y descarados ataques de China contra la seguridad de nuestra nación".

Momeno

Los detalles de las negociaciones de China y Cuba -que funcionarios estadounidenses describieron bajo condición de anonimato para discutir información confidencial- se producen en un momento en que la administración Biden ha intentado estabilizar las relaciones con Beijing, su principal rival estratégico, tras un periodo de crecientes tensiones.

The Wall Street Journal detalló por primera vez los planes para construir una instalación en Cuba.

El Consejo de Seguridad Nacional del Presidente Joe Biden rechazó las informaciones sobre la instalación prevista.

"Este informe no es exacto", declaró John Kirby, portavoz del Consejo, que no quiso entrar en más detalles.

"Hemos tenido preocupaciones reales sobre la relación de China con Cuba, y hemos estado preocupados desde el primer día de la administración sobre las actividades de China en nuestro hemisferio y en todo el mundo".

Kirby dijo que la administración estaba siguiendo de cerca esas actividades y tomando medidas para contrarrestarlas.

Añadió que "seguimos confiando en que somos capaces de cumplir todos nuestros compromisos de seguridad en casa y en la región."

Varios compromisos diplomáticos, militares y climáticos entre ambos países se congelaron el año pasado tras la visita a Taiwán de la entonces presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi.

Las relaciones bilaterales sufrieron un nuevo revés a principios de este año, cuando un globo espía chino fue sorprendido atravesando Estados Unidos, sobrevolando cerca de instalaciones militares sensibles.

El incidente provocó la reacción del Congreso y llevó al Secretario de Estado, Antony Blinken, a cancelar un viaje a Beijing previsto para febrero.

Blinken tenía previsto realizar el viaje en breve, según funcionarios estadounidenses, tras semanas de intensa diplomacia que habían incluido una reunión entre Jake Sullivan, asesor de seguridad nacional, y un alto funcionario chino, Wang Yi.

No está claro si las últimas revelaciones sobre la instalación prevista en Cuba podrían afectar de nuevo a la visita.

Representantes de la CIA y de la Oficina del Director de Inteligencia Nacional declinaron hacer comentarios.

Carlos Fernández de Cossio, funcionario del Ministerio de Asuntos Exteriores en Cuba, dijo que los informes sobre los planes para construir una base de espionaje chino en el país eran "totalmente falsos e infundados".

Un representante de la embajada china dijo que Beijing "no tenía conocimiento del caso".

China y Estados Unidos realizan habitualmente operaciones de vigilancia mutua.

Estados Unidos envía vuelos de vigilancia sobre el Mar de China Meridional, despliega activos militares en naciones aliadas de acogida en todo el Pacífico y vende y suministra armas a Taiwán, una isla democrática que el gobierno chino considera parte de su territorio.

Cruces

Funcionarios estadounidenses han acusado a China en los últimos años de ambiciosos ataques informáticos contra el gobierno y las empresas estadounidenses, de intentar reclutar agentes y activos dentro y fuera de Estados Unidos, y de vigilar y amenazar a los disidentes chinos en el extranjero.

El hecho de que China parezca perseguir un acuerdo más estrecho con Cuba no es en sí mismo sorprendente, afirman los analistas.

Ambos países han forjado lazos cada vez más estrechos desde el final de la Guerra Fría.

China es el mayor socio comercial de Cuba y desempeña un papel importante en las industrias agrícola, farmacéutica, de telecomunicaciones y de infraestructuras de la isla.

Beijing también posee una parte significativa de la deuda externa de La Habana.

La proximidad de Cuba a Estados Unidos la ha convertido desde hace mucho tiempo en un punto de apoyo estratégico deseable para los adversarios de Estados Unidos, quizás el más famoso durante la crisis de los misiles cubanos, cuando la Unión Soviética hizo y luego retiró sus planes de colocar misiles nucleares en la nación insular.

En la actualidad, Estados Unidos mantiene una relación en gran medida hostil con Cuba, que, al igual que China, está controlada por un gobierno comunista.

Las relaciones diplomáticas entre Estados Unidos y Cuba se congelaron poco después de que el régimen comunista de Fidel Castro llegara al poder en 1959; las relaciones solo se restablecieron por completo durante el mandato del presidente Barack Obama.

El presidente Donald Trump revirtió parte de esa medida al restablecer ciertas prohibiciones de viaje a Cuba y volver a designar al país como Estado patrocinador del terrorismo.

Las autoridades cubanas han pedido al gobierno de Biden que levante esta designación, pero se ha mantenido.

Sin embargo, Biden ha suavizado algunas de las demás restricciones impuestas por Trump. Cuba también sigue tratando la base estadounidense de Guantánamo, establecida a principios del siglo XX, como una ocupación ilegal.

c.2023 The New York Times Company

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