Por Eugenia Rodríguez|EDW|Las pequeñas y medianas empresas exigen que el Congreso avance en el tratamiento del DNU. El mal recuerdo de 26 mil
A solo dos meses del inicio del gobierno de Javier Milei, crece la preocupación en las industrias pymes que se declararon "en alerta” ante las consecuencias que trae aparejado el DNU aún vigente sobre la producción y el empleo. Más de cien organizaciones que representan a pequeñas y medianas empresas y cooperativas de la actividad se expresaron públicamente e hicieron llegar un pedido a la presidenta del Senado, Victoria Villarruel, exigiendo que “se convoque a sesión especial para debatir el Decreto de Necesidad y Urgencia que tantas trabas le pone a este eslabón del entramado productivo”. El sector emplea al 64% de las y los asalariados del país y aportan el 44% del PIB.
“Se puso un énfasis muy grande en la ley (ómnibus) lo cual es correcto pero al mismo tiempo está corriendo el DNU sin que se haya formado la Bicameral del Congreso para tratarlo y ahora el Senado, que debía convocar a sesión sigue sin hacerlo, porque siempre se encuentra alguna excusa”, analizaron en diálogo con este medio desde las agrupaciones pymes firmantes del comunicado.
Sobre los puntos del Decreto de Necesidad y Urgencia 70/2023 que más perjudican al sector destacaron que “los precios se disparan, los alimentos van hacia valores internacionales y los salarios, que mueven el consumo doméstico, están parados. Defendemos una serie de principios que apuntan a un desarrollo sobre la base del mercado interno, de la ampliación del consumo y de cuidar a las industrias, justamente el antagonismo de lo que está haciendo hoy Milei”. La presentación del pedido de tratamiento del DNU fue hecha por organizaciones de pequeñas y medianas empresas y cooperativas del país que, por otro lado, no tienen canales de diálogo abierto de parte de funcionarios del gobierno.
Alerta por la producción y el trabajo
“Lo sectores Pyme y Pyme Cooperativos nos encontramos en total estado de alerta y preocupación por el DNU 70/2023 que hasta hoy no ha sido tratado en el Senado y que nos trae muchas complicaciones”, empieza el comunicado elaborado por más de cien organizaciones entre las que se encuentran micro, pequeñas y medianas empresas y cooperativas que vienen “enfrentando dificultades ya desde otras gestiones y ahora vemos con angustia que con el DNU estaremos perjudicadas y se ampliará la posibilidad de que muchas vayamos a la quiebra o desaparezcamos”.
Entre los puntos centrales del decreto que más impactan en este segmento de la producción se encuentra “la creciente inestabilidad, las derogación de las leyes de Abastecimiento y de Compre Nacional, las del Régimen de Promoción Industrial, lo que sumado a la reforma sobre el Código Aduanero, impactan directamente sobre las MiPyMES”, indicó en diálogo con este portal Lara de Alvear, secretaria general del Frente Coordinador Pyme. En esa línea explicó que “la intención es organizarnos entre todas las asociaciones gremiales de empresarios para afrontar esta situación que ya vivimos en el 2015 con Mauricio Macri con la pérdida de muchas pymes, y por eso sostenemos que es importante visibilizar la problemática ante la posibilidad de que vuelva a suceder lo mismo”.
En diciembre el Índice Industrial PYME que mide CAME se desplomó 26,9% interanual, aculando en todo el 2023 una baja del 2,6%, al tiempo que más de la mitad de las empresas (53,4%) reportó dificultades para reponer stocks (materias primas e insumos). “Somos el motor del músculo productivo y necesitamos el apoyo permanente de las políticas públicas para fortalecer el desarrollo”, señalaron en el comunicado previo a la presentación del pedido a la Presidencia del Senado para que finalmente se convoque a la sesión especial que debe tratar el DNU de más de 600 artículos y que “genera tantas trabas al entramado productivo”, destacaron.
“Hemos empezado a convertir al sector de la producción en un sujeto político, es decir, que tenga voz y que sea escuchado en función de los intereses porque es el sector de la producción nacional no vinculado un mercado cada vez más oligopólico, y que termina teniendo intereses antagónicos con el trabajo. A partir de ahí y con una serie de otras organizaciones vimos que nos acercamos de manera violenta a un escenario que incluso va a ser peor que en la época del macrismo”, planteó en diálogo con El Destape, Carlos Cleri, del sector pyme cooperativo. Asimismo, sumó que “hay que tener en cuenta que las pymes y cooperativas existen porque hay actividades que no las pueden hacer las grandes empresas, y son en realidad la mayor defensa para que no se produzcan olas migratorias internas tan grandes como ha pasado en casi toda nuestra historia. Cuando no hay trabajo en las provincias se pueblan las grandes capitales, lo que afecta la calidad de vida y daña la capacidad de tener un desarrollo verdaderamente federal. Además hay que controlar el comercio internacional protegiendo puntualmente a aquellas industrias que lo necesitan para que puedan desarrollarse y competir”.
Laura fue contundente también al señalar que “hoy no vemos que haya una luz al final del túnel si todo sigue así, estamos en un momento donde las economías en el mundo son más bien proteccionistas, y acá parece predominar todo lo contrario”. Un aspecto que preocupa al sector tiene que ver con el financiamiento: “desde el 2015 hasta acá venimos con muchos problemas, el financiamiento que se ha sostenido no alcanza porque el universo PYME es sumamente diverso”, analizó. En la misma línea, el integrante del Movimiento Productivo 25 de mayo consideró que “no hay posibilidad de desarrollarse sin acceder a financiamiento y contar con acceso a insumos difundidos en los precios que corresponden. Hoy hay monopolios internos, como el del vidrio y todo lo que es metalúrgico, que afecta la compra de insumos ya que existe discriminación entre precios u obligaciones de volúmenes que afectan a las pymes”. Cleri mencionó a su vez que “la expulsión de mano de obra por parte del sistema capitalista demuestra que la única forma de canalizarla es creando condiciones de organización que contemplen el sistema cooperativo y generen otros mercados, que son los que mantienen el empleo y la producción”.
El ciclo neoliberal que se repite
Cuando una pyme cierre, el proceso para que vuelva a abrir sus puestas no es inmediato, considerando el capital de inversión, los años de trabajo, las condiciones de la economía. “Desde 2015 la natalidad pyme viene cayendo, estamos muy preocupados”, apuntaron las organizaciones y destacaron “aportamos un 44% del PBI del país, y empleamos un 64% de los asalariados registrados, un empresario pyme tiene sobre sus espaldas no solo la propia familia sino las familias de sus empleados, y además conoce las problemáticas de toda la comunidad”.
“Nuestras historias están atravesadas por épocas de desempleo como en los ´80, ´90 y 2001, y muchas personas que ya no tenían la edad para poder ser empleadas tomaron la determinación de invertir con lo que se tenía en una pequeña empresa o armar una cooperativa, de esa manera venimos aportando al crecimiento del país y con este modelo actual, similar a los mismos de esas épocas de crisis, no parece a haber políticas para el modelo productivo pyme”, señaló De Alvear al respecto. En relación, Cleri indicó que “en el macrismo desaparecieron 26.000 pymes simplemente porque era imposible sobrevivir en las condiciones de apertura de mercado, de falta de financiamiento y de apoyo, y tampoco tuvimos ninguna participación en los cuatro años de Fernández”.
En cuanto a proyecciones para 2024, un relevamiento realizado por Industriales Pymes Argentinos (IPA) mostró que el 80% pequeñas y medianas fábricas espera una caída de la demanda en los próximos tres meses, el 68% espera que se reduzca la capacidad instalada de la industria (26,8% espera mantener las mismas máquinas que hasta el momento) y un 56% teme por la caída del empleo o, aún manteniendo el personal, advierte por reducción de la cantidad de horas en las empresas (el 62% espera que la cantidad de horas trabajadas en el trimestre se reduzca). A la par, el 47,9% de las pequeñas y medianas empresas industriales espera que las necesidades de crédito aumenten en el próximo trimestre.
