Amén de que nunca pierde de vista a las víctimas ni al victimario, este True crime está bien contextualizado socialmente, con la noche, los excesos, la alegría y los misterios de
la movida joven de Berlín. "El mundo de las fiestas también tiene su lado oscuro", dice uno de los personajes que da su testimonio. De entrada se percibe el clima festivo, atravesado por la muerte.