Entre tanto público diverso, también hubo casos de personas que fueron en solitario, como el caso de Florencia (44), de Almagro. “Yo curtía Parque Rivadavia con un grupo de amigos metaleros.
Un día encontré un cassette de Megadeth en un puesto, era el tercer trabajo de la banda. Me gustó tanto que luego volví y me compré los que me faltaban. Y cuando vinieron en 1994 por primera vez, fui a los cinco shows en Obras, con tan solo catorce años”, narró la simpatizante, con algunas lágrimas de emoción que se deslizan por su rostro.