En una declaración conjunta, los líderes de Italia, Alemania, Reino Unido, Estados Unidos, Japón, Alemania y Canadá, además de los de la Unión Europea (UE), afirmaron que, "con sus acciones, Irán
ha dado un paso más hacia la desestabilización de la región y corre el riesgo de provocar una escalada regional incontrolable. Esto debe evitarse".