Las bóvedas automatizadas que ofrece la compañía, tienen nueve anillos de seguridad durante el proceso que realiza el cliente, que incluye puertas blindadas con sistema de esclusas - cerrojo, molinete de
alta seguridad, detector de metales, puertas corredizas y reconocimiento biométrico de huella, rostro e iris, junto a ID y PIN personal. No obstante, "el proceso demora unos minutos, agilizado con un sistema de turnos que permite que ningún cliente tenga demora para operar o se cruce con otras personas, cuidando así la privacidad y confidencialidad”, dice Piantoni.