Por Javier Slucki|EDW| La actividad industrial de las pequeñas y medianas empresas bajó en marzo más que en febrero y termina de desmantelar el ya
"Lo peor va a ser entre marzo y abril", había dicho Javier Milei a mediados de febrero pasado, anticipando que lo peor del ajuste, que llevaba entonces más de un 50% de inflación y una caída del salario real del 20% en dos meses, todavía no había llegado. Ahora sus vaticinios están finalmente cumpliéndose: un informe de la CAME reveló que la industria pyme no solo disminuyó casi un 12% en marzo, sino que además esa caída fue mayor que en el mes previo.
Concretamente, la actividad industrial pyme disminuyó un 11,9% en marzo pasado respecto al mismo mes de 2023. También bajó respecto a febrero de este año, en un 3,4%. Se trata del cuarto mes consecutivo en el que la actividad fabril pyme retrocede. Pero incluso más preocupante que eso es que la caída fue mayor que en febrero.
Esto permite desmantelar un argumento del oficialismo. La propia CAME había indicado, en otro informe de hace unos diez días sobre la actividad comercial, que las ventas pyme bajaron en marzo un 12,6% interanual. Como esa caída fue de menos de la mitad que la baja del 25% interanual en febrero, el dato fue utilizado por Milei para destacar el supuesto inicio de una recuperación "en V".
Se trataba de un argumento falso ya que lo que hubo en verdad fue simplemente una desaceleración de la caída y no una recuperación. De hecho, la baja de la actividad comercial se comprobó también en la medición intermensual, por un 3,2%.
Pero, ahora, ni siquiera puede sostenerse ese falaz razonamiento porque el gráfico que dibuja la actividad industrial pyme empieza a dejar de parecerse a una V para asimilarse más a una M, ya que la caída de febrero había sido menor, de "solo" un 9,9% según la CAME.
La cámara empresarial advierte, en este escenario de profundización de la caída, que "las pymes no ven un piso en el corto plazo". Y, por primera vez en la era Milei, el informe mensual de la CAME habla de posibles suspensiones por la falta de ventas: "Hay sectores con niveles altos de stock que se debaten entre seguir produciendo para no cortar el proceso y tener que cesantear personal o frenar".
"Al no tener un piso y ni siquiera ver en qué momento se puede revertir esto, se llega a un momento en el que las reservas de capital se van gastando. Entonces, si no puedo sostener la nómina de empleados no se puede mantener la producción. Si querés producir también tenés que invertir capital. Mantener stock sin vender también es un fuerte desgaste financiero", explicó a El Destape el vocero de esta cámara pyme, Salvador Femenía, remarcando el círculo vicioso de la recesión en el sector.
Femenía agregó que, pese a que el más afectado por la posibilidad de cesantías es el sector de "Metal, maquinaria y equipo, y material de transporte", ya afectado por esta problemática desde hace meses, de a poco "todos los sectores, en forma transversal, van cayendo en esa situación".
En marzo, la caída en la producción industrial se comprobó en todos los sectores excepto en indumentaria, donde se registró una suba del 10,3%. Aunque, cabe aclarar, frente a una floja temporada 2023 en la que las ventas fueron malas por la inflación por encima del promedio que mostraba el rubro.
La caída de la industria pyme en marzo, rubro por rubro
Alimentos y bebidas: el sector registró una caída de 5,6% anual a precios constantes en marzo y de 3,6% en la comparación mensual. En el primer trimestre del año acumula una baja de 14,2% anual. Las industrias operaron con 73,3% de su capacidad instalada.
Textiles e indumentaria: este sector mejoró 10,9% anual en marzo, aunque registró una caída de 0,5% frente a febrero. Para el primer trimestre del año acumula un aumento de 2,3%. Las industrias operaron con 71% de su capacidad instalada. Esto es un nivel bajo para el sector, pero mejor que el del año pasado.
Maderas y muebles: en marzo, el sector se retrajo 11,9% anual a precios constantes, y 4,4% en la comparación mensual desestacionalizada. En el primer trimestre del año, acumula un descenso del 20,1%. Las industrias operaron con 72,6% de su capacidad instalada.
Metal, maquinaria y equipo, y material de transporte: en marzo, el sector tuvo una contracción de 16,8% anual a precios constantes y del 4,8% en la comparación mensual. Para el trimestre, acumula una caída de 24,5% frente a los mismos meses de 2023. Las industrias operaron al 66,6% de su capacidad instalada, niveles similares al de los últimos meses.
Químicos y plásticos: en marzo, el sector experimentó una significativa contracción del 20,7% anual a precios constantes, y de 4,4% en la comparación mensual. En el trimestre, la producción acumula una caída de 28,7% frente al mismo período de 2023. Durante el tercer mes del año, las industrias operaron con 65,6% de su capacidad instalada, con bajos niveles de inversiones.
Papel e impresiones: la actividad se retrajo 27,4% anual a precios constantes, siendo nuevamente el sector con mayor retroceso. En términos mensuales, también se registró una retracción de 5% y en el primer trimestre del año la actividad acumula una caída de 23,7% frente al mismo período del año pasado. Las empresas operaron con 77,9% de su capacidad instalada, nivel alto tanto en el comparativo histórico como en relación con otros sectores, pero que se explica por los bajos niveles de inversiones.