"Tras cuatro meses de insistentes agresiones y descalificaciones a aquellos que no coinciden con su proyecto, el presidente argentino obró un milagro, casi la mezcla del agua y del aceite: unió
en una misma manifestación a peronistas, radicales, socialdemócratas, estudiantes, profesores, las dos centrales obreras e incluso legisladores ultraliberales", remarcó el portal español.