Una serie de meteduras de pata e ideas poco concluyentes ensombrecieron sus comentarios.
Contra todo pronóstico, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, reafirmó sus planes de presentarse a la reelección. Así lo hizo en una rueda de prensa
Una serie de meteduras de pata e ideas poco concluyentes ensombrecieron sus comentarios.
Contra todo pronóstico, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, reafirmó sus planes de presentarse a la reelección. Así lo hizo en una rueda de prensa
este jueves en Washington que, según los medios de comunicación, dejó más preguntas que respuestas.
Tras una desastrosa participación en el primer debate presidencial contra Donald Trump, Biden, de 81 años, generó un montón de dudas sobre las posibilidades que tiene de ocupar la Casa Blanca para un segundo mandato.
En la sesión de preguntas, realizada al margen de la cumbre de la OTAN, se esperaba que el mandatario demostrara que tiene capacidad para representar los intereses de sus partidarios en las próximas elecciones de noviembre. Sin embargo, una serie de meteduras de pata e ideas poco concluyentes ensombrecieron sus comentarios.
En varios medios indicaron que la actuación de Biden estuvo lejos de ser exitosa. "Las meteduras de pata verbales y la tartamudez que han formado parte de su identidad durante medio siglo se mostraron en todo su esplendor", escribió Time. Fox News, por su parte, recogió las opiniones de conservadores que tacharon la rueda de prensa de otro "desastre".
Lapsus mentales
El demócrata sufrió varios lapsus, como cuando confundió los apellidos de la vicepresidenta Kamala Harris y del expresidente Donald Trump: "No habría elegido a la vicepresidenta Trump para ser vicepresidenta si no creyera que está cualificada para ser presidenta". O cuando, al responder a preguntas sobre el suministro de armas a Ucrania, dijo seguir "el consejo de mi comandante en jefe, mi jefe de personal militar", dando a entender que se sometía al jefe del Estado Mayor Conjunto, su principal asesor militar.
Asimismo, anunció a la sala que los encargados del encuentro con la prensa le habían dado una lista preseleccionada de periodistas a los que iba a ceder la palabra, provocando dudas sobre si las preguntas habían sido convenidas con anterioridad.
Las nuevas meteduras de pata se produjeron apenas unas horas después de que Biden desatara una ola de risas en la sala de diplomáticos de la OTAN al presentar erróneamente al líder del régimen ucraniano, Vladímir Zelenski, por el nombre de su contraparte en el conflicto, el presidente ruso Vladímir Putin.
"Jodidamente bueno"
Mientras tanto, desde la Casa Blanca calificaron la actuación de "jodidamente buena".
"Para responder a la pregunta en la mente de todos: No, Joe Biden no tiene un doctorado en asuntos exteriores. Es así de jodidamente bueno", escribió Andrew Bates, subsecretario de prensa de la Casa Blanca, en su cuenta en la plataforma X.
Se mantiene en la contienda
Tras ser preguntado por su apretada agenda y si a pesar de lo exigente de su cargo se sentía preparado para las continuas presiones en caso de ser reelegido, Biden reconoció que desde que cometió "ese estúpido error en campaña, durante el debate", su agenda ha estado "a tope". "Sólo tengo que ir un poco más despacio", añadió.
El líder estadounidense, una vez más, culpó a sus ayudantes por sus propios tropiezos. "Amo a mi equipo, pero añaden cosas todo el tiempo. Estoy recibiendo el infierno de mi esposa. En fin, lo siento", dijo, yéndose por las ramas una vez más.
Finalmente, el mandatario respondió que solo reconsideraría permanecer en la carrera electoral si su equipo le dijera que no hay forma de que él pueda ganar, después de lo cual susurró al micrófono: "Nadie dice eso. Ninguna encuesta dice eso".
Creciente frustración
Mientras tanto, el descontento de los demócratas con su candidato va en aumento. El pasado domingo, medios estadounidenses reportaron que unos 10 demócratas de alto rango discutieron la posibilidad de que Biden retire su candidatura de la campaña electoral. Según senadores estadounidenses, "está claro que muchos están a punto de hablar o firmar cartas para decirle a Biden que todo debe terminar". El congresista Adam Smith, presidente del Comité de Servicios Armados de la Cámara de Representantes, se convirtió este lunes en el legislador demócrata de más alto rango en instar públicamente al presidente a renunciar a su candidatura a la reelección.
En cuanto a la opinión pública, a finales de junio la cadena CBS News publicó los resultados de una encuesta propia, basada en una muestra nacional de 1.130 votantes, según la cual 72 % de los sondeados no creen que Biden deba postularse para presidente.