Trump también excluiría de impuestos los pagos a la Seguridad Social, lo que podría costar 1,2 mil millones de dólares en 10 años. El riesgo es que esos impuestos ayudan justamente
a financiar la Seguridad Social. Sin esos ingresos, el programa sería incapaz de pagar las prestaciones completas a partir de 2033, o dos años antes de lo previsto actualmente, según un análisis de Brendan Duke, director ejecutivo de política económica del Center for American Progress, un think tank liberal.