Al igual que pasó con la ley de recomposición a los jubilados, el presidente Javier Milei se apresta a vetar la Ley de Financiamiento Universitario, también votada en ambas Cámaras del
Congreso por amplia mayoría. En el caso de los cambios en la movilidad jubilatoria hubieran significado un gasto extra del 0,45% del PBI en todo el año; los fondos para las Universidades implicaría un porcentaje bastante menor, 0,14% del PBI, siempre en cálculos de la Oficina de Presupuesto del Congreso (OPC). Seguir leyendo